"'A Chloris", sobre un texto del s. XVI escrito por Théophile de Viau, fue compuesta en 1916, por el que fuera amante de Marcel Proust, Reynaldo Hahn (Caracas, 1874-París 1947), recuerda más que mucho al Bach del segundo movimiento de la Suite para Orchesta núm. 3, de hecho se considera que Hahn lo que está realmente haciendo es un homenaje a Bach, aunque todo el mundo habla del aria de la Suite Orquestal 3 para mí es inevitable pensar también en las Variaciones Goldberg. Sobre el piano se alza la voz de la cantante. El resultado es de enorme belleza. El pianista Graham Johnson ha considerado "A Chloris" como la cumbre del arte de Reynaldo Hahn como autor de pastiches ("pasticheur") y el máximo exponente de viaje en el tiempo dentro de la Mélodie francesa. La escuchamos cantada por Susan Graham.
Si es verdad, Chloris, que me amas,
Y he oído, que bien me quieres,
No creo que ni los propios reyes
Posean una felicidad semejante a la mía.
¡Que la muerte sería inoportuna
Si viniera a cambiar mi fortuna
Por la felicidad de los cielos!
Todo cuanto dicen de la ambrosía
no impresiona a mi fantasía
ante la recompensa de tu mirada.
S'il est vrai, Chloris, que tu m'aimes,
Mais j'entends, que tu m'aimes bien,
Je ne crois pas que les rois mêmes
Aient un bonheur pareil au mien.
Que la mort serait importune
De venir changer ma fortune
A la félicité des cieux!
Tout ce qu'on dit de l'ambroisie
Ne touche point ma fantaisie
Au prix des grâces de tes yeux.
Esta mélodie la podéis encontrar en el siguiente disco de Susan Graham y Roger Vignoles: La Belle Époque (The Songs of Reynaldo Hahn). 1998
Reynaldo Hahn fue, respecto a la música, de todo un poco: compositor, pianista, cantante, profesor de canto, director de orquesta y crítico musical (por ejemplo en Le Figaro). Nacido en una familia numerosa -once hermanos- y adinerada, su padre era tan aficionado a la ópera que construyó el Teatro de la Ópera de Caracas en 1853. Aunque había nacido en Caracas su familia marchó a París cuando el futuro compositor apenas tenía tres años, allí estudió en el Conservatorio de Música, uno de sus profesores fue Jules Massenet, que lo aceptó por sus dotes musicales y con carácter excepcional cuando Hahn tenía 12 años -según relató el mismo Hahn, sea o no cierto, a los cinco años ya tocaba el piano y a los ocho componía-.
No se esforzó mucho en sus estudios musicales; sin embargo, la posición social de su familia, su inteligencia, su afición a la lectura y el ambiente intelectual en el que desenvolvió permitieron que se desarrollara su personalidad artística. En realidad fue un autodidacta, sus estudios musicales no le habían permitido terminar el bachillerato, este hecho no le impidió dedicarse también a la escritura. Desde niño fue un gran cantante, se prodigó en los salones de París, en ellos era capaz tanto de acompañar a otros cantantes como de ofrecer recitales en los que a la vez tocaba el piano y cantaba, pero nunca estuvo interesado en desarrollar una carrera profesional.
Cap problema maac.
ResponderEliminarDos veces gozada, dos.