sábado, 16 de febrero de 2008

Strauss - Sinfónica de Chicago - Solti - Popp: Engranaje perfecto.


A riesgo de ser monónoto, pues tanto los Cuatro últimos lieder como Lucia Popp ya han aparecido por el blog, no puedo resistir la tentación de dedicarles otro post.

Una combinación espectacular: Sinfónica de Chicago, Solti, Popp y los Viert Letzte Lider de Richard Strauss, considerados por Solti como “milagrosos”. Todo funciona a la perfección. Una interpretación muy emotiva.

Cuenta Solti en sus memorias que a pesar de que sólo estuvo tres veces con Richard Strauss, tuvo una influencia decisiva en su vida profesional. Cuando lo conoció hacía poco que a había compuesto las Cuatro últimas canciones y quedaba muy poco tiempo para que llegara su muerte. El célebre director húngaro dirigió en su funeral el trío final de El caballero de la rosa (Der Rosenkavalier) tal como el compositor había indicado en su testamento y la Marcha fúnebre de la Sinfonía número 3, "Heroica", de Beethoven.

La Orquesta Sinfónica de Chicago es una de las más antiguas de Estados Unidos, sus directores han sido Theodore Thomas (desde su fundación en 1891 hasta 1904), Frederick Stock (1904-42), Désiré Defauw (1943-47), Artur Rodziński (1947-48), Rafael Kubelík (1950-53), Fritz Reiner (1953-63), Jean Martinon (1963-68), Georg Solti (1969-91) y Daniel Barenboim (1991-2006). La lista de directores invitados es impresionante: el mismo Richard Strauss, >Saint-Saëns, Elgar, Slatkin, Previn, Tilson Thomas, Bernstein, Stokowski, Leinsdorf, Ormandy, Szell, Munch, Giulini, Abbado, Boulez...

Lucia Popp, una de las cantantes cuya muerte más me ha impactado, un poco por su carácter prematuro y otro poco porque fue una de las primeras de las que fui consciente como aficionado a la ópera, empezó su carrera estudiando medicina pero la abandonó para dedicarse al teatro. Durante una representación de El burgués gentilhombre de Molière la escucho cantar una profesora de canto, Hrusovska-Pronsenkova, e inmediatamente le ofreció sus servicios, lo que supuso un vuelco en su vida profesional: terminó estudiando en la Academia de Música de Bratislava y en esta ciudad debutó con 23 años interpretando la Reina de la Noche en La Flauta Mágica (Die Zauberflöte). Poco después la escuchó Karajan y la contrató para cantar en la Ópera de Viena, allí comenzó cantando Barbarina en Le nozze di Figaro, le siguió la Reina de la Noche, su éxito fue apoteósico, desde entonces se la considera una de las mejores Reinas de la Noche de todos los tiempos (tampoco es fácil encontrar Paminas que esten a su altura). Walter Legge, que de tonto no tenía un pelo, se la recomendó a Klemperer para su registro de Die Zauberföte en EMI (1964). Cuentan que en la audición con Legge, su esposa, Elisabeth Schwarzkopf exclamó: "What a fantastic creature you are!".

Su repertorio estaba centrado sobre todo en cinco autores: Mozart (Reina de la Noche, Barbarina, Zerlina, Susanna, Despina, Pamina, Ilia, Servilia), Richard Strauss (Sophie, Marschallin, Arabella, la Condesa de Capriccio), Janacek, Dvorak y Mahler. Tambien se dedicó al repertorio barroco (Bach y Haendel) y al lied.

Su voz sufrió una evolución natural desde la tesitura de soprano lírico-ligera hasta la de lírica, pero sin que podamos decir que sufriera ningún deterioro notable en el registro superior. Su timbre, muy penetrante, brillante, me parece más plateado que dorado, su voz, homogénea, sin cambios de color entre los diferentes registros. Su dicción muy cuidada y su canto muy elegante, ligado y expresivo.


2 comentarios:

  1. Siendo una cantante que adoro, quizás no sea éste el repertorio en el más me apasione.

    Troppo plateada ? En exceso ligera ? Escasez de claroscuros ?
    Sí, creo que la debilidad está en el color.

    ¿Opiniones?

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  2. La verdad es que comienza fatal, las primeras frases de Frühling son muy complicadas para ella precisamente por los graves, pero la línea de canto, el fraseo, la dicción, ahí no le podemos poner pegas.

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