¿Pero es necesario reivindicar L'elisir d'amore? En principio parece que la respuesta lógica sería que no, L'elisir es una de las óperas de Donizetti más afianzadas en el repertorio tradicional de los teatros de ópera y no hay duda de que goza del favor del gran público; sin embargo, por las conversaciones que voy teniendo con algunos aficionados a la ópera da la impresión de que que al final le salvan la vida, aunque por los pelos.
No lo entiendo, es cierto que el argumento no es el más original de la historia, tampoco es muy creíble, pero todos los aficionados solemos pasar por alto con frecuencia la inverosimilitud de las tramas de muchísimas otras óperas. Para mí es una obra entretenida, sobre todo porque contiene una música que, sin grandes pretensiones, sirve al drama con frescura e inspiración, constituyendo uno de los mejores ejemplos de ópera bufa del XIX.
Contiene varios fragmentos que podrían formar parte de una recopilación de los mejores momentos de la histoira de la ópera bufa, uno de ellos es el aria de Dulcamara "Udite, udite, o rustici, udite". Próximamente se estrenará esta obra en el Palau de les Arts, y el rol del médico ambulante será encarnado por Erwin Schrott, a quien vamos a escuchar más abajo; no es Schrott un cantante tan malo como muchos dicen, sobre todo en este tipo de papeles bufos, pero es cierto que ni es Giuseppe Taddei, ni Sesto Bruscantini, para qué nos vamos a engañar, pero a ver quién lo es. Escucharemos, tras Schrott, a Taddei, a Bruscantini ya lo haremos otro día, si es que me decido a dar el cñz con esta ópera.
No lo entiendo, es cierto que el argumento no es el más original de la historia, tampoco es muy creíble, pero todos los aficionados solemos pasar por alto con frecuencia la inverosimilitud de las tramas de muchísimas otras óperas. Para mí es una obra entretenida, sobre todo porque contiene una música que, sin grandes pretensiones, sirve al drama con frescura e inspiración, constituyendo uno de los mejores ejemplos de ópera bufa del XIX.
Contiene varios fragmentos que podrían formar parte de una recopilación de los mejores momentos de la histoira de la ópera bufa, uno de ellos es el aria de Dulcamara "Udite, udite, o rustici, udite". Próximamente se estrenará esta obra en el Palau de les Arts, y el rol del médico ambulante será encarnado por Erwin Schrott, a quien vamos a escuchar más abajo; no es Schrott un cantante tan malo como muchos dicen, sobre todo en este tipo de papeles bufos, pero es cierto que ni es Giuseppe Taddei, ni Sesto Bruscantini, para qué nos vamos a engañar, pero a ver quién lo es. Escucharemos, tras Schrott, a Taddei, a Bruscantini ya lo haremos otro día, si es que me decido a dar el cñz con esta ópera.
Lo primero que me viene a la cabeza es:
ResponderEliminarMenos mal maac, has vuelto a publicar, cosa que me alegra y nos beneficia a unos cuantos, que tenemos la sana costumbre de asomar la cabeza por tu casa y aprender de las cosas que nos dices y propones.
Segundo, ¿no será que el perfil atontado de Nemorino les resta atractivo al personaje y a la ópera? El prota es un poco memo, digásmolo así para no ofender a nadie y luego tenemos un timador y un militar chulesco. Adina va de pija ricachona y no acaba de cuadrar que al final se acabe quedando con el más tonto.
A mi no me acaba de gustar esta ópera, aunque he de reconocer que tiene un par de momentos:
el "Adina credimi" y el dúo de Dulcamara y Nemorino, que me gustan mucho.
No tardes tanto en publicar
Es que en la vida, Joaquim, somos muchos los tontos. Ya ves los años que llevan vendiendo crecepelo o los inverosímiles aparatos, hierbas y drogas para adelgazar, incluso ideas económico-políticas y la gente seguimos picando.
ResponderEliminarPor otra parte, el protagonista es un antihéroe y eso, además de que da un toque de originalidad a la ópera, a mí me gusta. Que al final la, en distinto sentido, tonta de Adina se quede con él no es más que un resultado lógico dentro de las convenciones del género, lo ilógico sería justo lo contrario. Pero lo bueno de L'elisir se encuentra, sin duda, en su inspiración melódica y la frescura musical que irradia, pero eso ya lo iremos viendo si, al final, prosigo la serie.
Respecto a lo otro, Joaquim, te agradezco muchísimo el comentario, pero me parece que poco tengo que enseñarte.
Bueno, sin empujar, me apunto a alegrarme por tu reaparición, porque, para qué nos vamos a engañar, a ver quién es como maac.
ResponderEliminarL'elisir d'amor me gusta con moderación y como a la historia no le suelo pedir mucho, no me importa que Nemorino sea un atontado o un Woody Allen. A muchas óperas hay que ponerles voluntad para sacar punta al texto, ¿no?
Es una ópera bufa y belcantista. A partir de esas coordenadas, ponerse a buscar coherencia en el libreto o en el comportamiento de los personajes es tan innecesario como infructuoso, mejor disfrutemos de cuanto haya de disfrutable sin darle demasiadas vueltas.
ResponderEliminarMaac, me sumo a los que se congratulan por tu regreso al blog.
ResponderEliminarYo, Padre, me acuso de ser uno de los que no acaban de digerir este Elisir.
Para mí el problema no es el libreto, que peores los hay, o la música, que no me es desagradable, o el personaje de Nemorino... A mí, simplemente, me resulta aburrida. No sé muy bien cuál es la causa, pero es de las que me aburren.
Dicho lo cual, me pienso ver al menos un par en Les Arts estos próximos días... a ver si me rehabilito o acabo Nemorino perdido.
Un abrazo, Maac
No lo creas maac, siempre aprendo.
ResponderEliminarNo busco coherencias ni res de res, es que es una plasta. Prefiero Don Pasquale.
Estoy con Titus, no tiene sentido hacer un ejercicio sesudo de análisis con el libreto de este tipo de óperas que tiene coordenadas propias (las mismas que las de una Sonnambula o una Fille). Pero es que también han cambiado las coordenadas canoras e interpretativas (no hay más que comparar los dos vídeos) y quizá por eso nos aburra este tipo de obras. El contraste está precisamente en que el canto (entendido en este caso como un bel canto fino y estilizado)redime e idealiza un ambiente, unos personajes y una trama anodina.
ResponderEliminarpor fin de vuelta maac!
ResponderEliminarmás que aburrirme a mí se me repite mucho el Elixir. Como las pelis ***, entretenida, previsibles y poco más. Ah, y prefiero Dulcamaras gordetes y campechanos como este estupendo Taddei, entonces si que sube el ranking!
A mi lo que más me gusta de esta obra es que ha ocasionado un poltergeist doble: Maac y Golaud, qué maravilla.
ResponderEliminarDos imprescindibles para mí, de los que siempre he aprendido mucho, tanto que a su lado me siento Nemorina perdía.
A mi, y no tirarme los perros por Dió, el aliciente de esta obra es que canta Ramón Vargas que me gusta mucho. Y ese ambiente playero tan refrescante que se adivina por la puesta en escena.
Yo me sumo a la alegria de ese proyecto que nos has anticipado de que nos vas aproximar a l'elisir y que lo vas a reivindicar dedicándole unos post. Si si, venga, sea, sea. Te aseguro que los leeré y escucharé con fruición.
Bueno, como yo creo que se trata en principio, de una opera buffa, o casi, los personajes y las situaciones son muy importantes.
ResponderEliminarAsí sucede con otras óperas belcantistas y buffas.
No es el caso de l'Elixir, bajo mi punto de vista con un libreto demasiado endeble y unos personajes poco divertidos y una partitura "cançonera"
Assai, Atticus, Golaud, Titus, kalamar, gracias.
ResponderEliminarGolaud ha dado en el clavo, se necesitan unos grandes intérpretes para hacer justicia a la obra y no necesariamente con vis dramática -igual un día sale el tema del Nemorino de Pavarotti- ni con especiales cualidades de extensión vocal, se trata de cantar y de hacerlo bien, tan sencillo y tan difícil. Joaquim, lo de "cançonera" no te pega, es cierto que lo es pero es un argumento que viniendo de ti me extraña. Quizás Donizetti cargó demasiado las tintas en lo sentimental -Una furitva lacrima fue una de sus imposiciones contra el parecer de Romani- y debió haberse centrado más en lo cómico.
Hay un tema sobre el que gira toda la pieza y que a mí me interesa mucho: la falta de confianza del hombre en sí mismo y la necesidad de recurrir a remedios místicos o mágicos para solucionar los problemas. Y me parece que es una de las razones de su éxito, junto a la frescura de su música -la principal- y la simpatía que despertó el antihéroe ante el gran público el día de su estreno. Por otra parte me parece indiscutible que el argumento es endeble o que la música no está siempre al mismo nivel. Las circunstancias en las que se compuso -no había tiempo- también contribuyeron a ello.
L'elisir d'amore está considerada una ópera cómica, aunque haya elementos buffos (como el personaje de Dulcámara)no lo es netamente como Don Pasquale.
ResponderEliminarAnímate, y saca el tema del Nemorino de Pavarotti tú y haz un repaso por algunos otros... lo dejo en el buzón de sugerencias.
Yo también celebro tu vuelta, Maac. Y a mi también me gusta l'Elixir ya que cuando me iniciaba en la ópera, pasaba suave, romántica y divertida y me invitaba a seguir escuchando. Los personajes no resisten el análisis pero si se toma como un cuento, nos gusta que el ingénuo Nemorino vea premiada su buena fe, que Adina se humanice con este amor. Y que sean todos muy felices.
ResponderEliminarMalgrat que la trama i el perfil dels personatges tenen poca consistència, aquesta obra no deixa de transmetre un sentiment d'alegria i felicitat!
ResponderEliminarMúsica chispeante, fresca, deliciosa. "Una furtiva lagrima", "Adina Credimi", "Prendi, per me sei libero" son fragmentos preciosos, y las intervenciones de Dulcamara muy divertidas y las de Belcore hilarantes. Pero dejarme citar un pasaje que a mi particularmente me tiene encandilado: se trata de una especia de romanza que inicia Nemorino y luego es acompañado por Gianetta y un coro de amigas. Si, estoy hablando de "Dell'elisir mirabile". Es una delicia concertante absoluta, que se me hace breve, demasiado breve. Donizetti en estado puro. ¿El argumento? Tonto, tonto, tonto, de tanto que lo es que me pongo tierno. Tengo una versión en CD con una soberbia Sutherland, o sea, como siempre, y un Pavarotti realmente glorioso.
ResponderEliminarJosep Olivé.
Se te echaba de menos , Maac :)
ResponderEliminarPues a mi me gusta el elisir ! Me gusta porque es alegre, romántica a veces, divertida otras, a poco acertada que este la función terminas cantando alguna melodia..y termina bien :)
Además, a mi Nemorino no me parece tonto. Yo diria que es un personaje que se pueden encontrar muchos por la vida, como decía Maac, mucha gente acude a cosas "extrañas" cuando esta desesperado..hay muchas clases de elisires modernos :)
No voy a decir que el libreto sea bueno, no lo es pero...hay operas estupendas con libretos incluso mas increibles, esta no es la única y no se les echa tanto en cara.
Si alguien va el 26 por alli estaré :)
Di que si, Kenderina, al final las cosas no han cambiado tanto. La historia es perfectamente posible en el siglo XXI, es más, creo que todavía se ha radicalizado más, de hecho hay un programa en Tele 5, no sé cómo se llama, en el que van un conjunto de personas de un sexo que se ofrecen como pretendientes a otra persona del sexo contrario, no me parece que se valore otra cosa que la apariencia física e instintos primarios de seducción; por otra parte, cuando en las noticias de sociedad muestran las fiestas a las que acuden los banqueros no hay más que analizar las parejas, impera por encima de todo el abuelo ($$$)acompañado de tía buenorra; por no hablar de la cantidad de anuncios dedicados a vender maquinas y productos que mejorarán nuestra aparaiencia física sin esfuerzo. En este sentido el libreto, sea o no bueno -yo creo que es eficaz- no ha perdito más que el de La Cenerentola o L'Italiana in Algeri.
ResponderEliminarA mí me pasa lo que a Josep con el "Adina credemi", de hecho me hubiera gustado que se desarrollara como una romanza independiente en lugar de estar integrado en un concertante, me quedo con ganas de más; es curioso cómo Donizetti integra estas frases tan bellas y cargadas de abandono de Nemorino con las siguientes de Belcore, tan grotescas (luego retoma la melodía inicial Adina). Claro que, volviendo a lo mismo, esas cuantas frases adquieren más o menos relevancia en función de quién las cante.
ResponderEliminar*Credimi, perdón.
ResponderEliminarYo creo que esta es la típica ópera de Donizetti, muy al estilo de otras que escribió, empezando por el breve preludio y el coro de segadores, tan habitual en sus obras. Es una obra para pasar un buen rato, fácil de oir, simple y que termina bien, con el "inocentón" de Nemorino casándose con Adina. En su primera intervención "Quanto è bella" Nemorino se describe como es: "en aquél corazón (el de Adina) soy incapaz de inspirar el más leve efecto. Yo soy un idiota y sólo sé suspirar. ¿Quién la mente me iluminará? ¿Quién me enseñará a hacerme amar?". A continuación Adina describe el argumento de la ópera narrando la historia de Tristán e Isolda. Belcore es un galán frente al tímido Nemorino, absolutamente enamorado de una caprichosa Adina, como queda reflejado en su excelente dúo. La presencia del charlatán Dulcamara "Udite, udite o rustici", personaje fundamental, nos termina de dibujar lo que vá a ser esta ópera, en cuya descripción no me extiendo. Simplemente decir que, gustos aparte, creo que es una ópera muy agradable, sobre todo para no iniciados, con un excelente reparto: Ramón Vargas es un magnífico tenor y con un poco de "marketing" estaría mucho más encumbrado. Aleksandra Kurzak es una muy buena soprano, Fabio Capitanucci un más que buen barítono y Erwin Schrott un excelente bajo (recuerdo su sensacional "Don Giovanni" de la 1ª temporada, sus "Bodas de Figaro" o su "Fausto") con una magnífica voz y al que sólo veo un defecto: su tendencia a "sobreactuar". En resumen, un magnífico reparto para una ópera agradable. Teniendo en cuenta que hoy no existen las grandes voces de antaño, creo que sobre el papel y sin haberla visto y escuchado todavía, no se le puede reprochar nada, al revés recomendar a la gente que vaya a verla ya que vá a pasar un buen rato. Ya lo veremos a partir del día 26. Gracias Maac por dejarme escribir en tu blog y por "tu regreso". Ya comentaremos, si me no te importa, nuestras impresiones cuando hagas tu crónica y yo la haya escuchado.
ResponderEliminarUn aficionado a la ópera.
Gracias, Anónimo, por tu comentario tan extenso, con el que estoy de acuerdo al 100%. Agradecería que usaras un nick porque como hay varios Anónimos siempre será más fácil identificar tus mensajes. Saludos.
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