domingo, 27 de mayo de 2012

"Il trovatore" - Palau de les Arts de Valencia


Mientras que la Uno de TVE, esa cadena de televisión pública que últimamente tenía pretensiones de rivalizar en prestigio con la BBC y que gracias al sentido democrático de algunos es previsible que se convierta en un apéndice del poder ejecutivo (otro sueño que se nos viene al traste), retransmitía el Festival de Eurovisión con Pastora Soler como representante  de la cadena (ignoro en qué posición habrá quedado), en el Palau de les Arts de Valencia se inauguraba la quinta edición del Festival del Mediterráneo con la presencia de Su Majestad la Reina de España,  que para eso se bautizó el edificio con su nombre, Reina Sofía. Es todo un detalle que la Corona apoye a esta institución, por lo menos alguien más allá de nuestras fronteras nos hace algo de caso, más mérito tiene si pensamos en la que le está cayendo a su yerno, implicado en una trama de corrupción que de refilón pasa por la Ciudad de las Artes y las Ciencias. La ópera elegida en esta ocasión es una de las obras maestras de Verdi, Il trovatore, lo digo por si alguien no se había enterado, y es que llevo más de un mes con esta ópera para arriba y para abajo un poco sin ton ni son o, en todo caso, sin orden ni concierto. Presiento que en el futuro El blog de maac atravesará una larga sequía trovadoresca, así que no sufriréis más en este sentido, pero también es verdad que se me han quedado dos o tres cosas en el tintero. Las hordas levantiscas estaban esta vez divididas, unos en Les Arts, los otros en el Liceu asistiendo a Adriana Lecouvreur.  




Pero vayamos al grano. Il trovatore es la primera ópera de Verdi que dirige Zubin Mehta en el Palau de les Arts, ópera que podemos considerar su especialidad dentro del repertorio del de Busseto, el director cuenta con dos grabaciones en estudio, una de ellas, la de 1970 para RCA,  puede situarse tranquilamente entre las de referencia, cuenta con la participación de Leontyne Price, Plácido Domingo, Fiorenza Cossotto e Sherrill Milnesl en los principales papeles, la otra, grabada para DECCA en 1996, cuenta con un reparto interesante para la época (Pavarotti, Banaudi, Verret y Nucci) . 

La producción está firmada escénicamente por Gerardo Vera  y la misma servirá para representar Medea de Luigi Cherubini, económicamente es una buena solución, así matamos dos pájaros de un tiro, esperemos que artísticamente el resultado también sea positivo. Para que la utilización de una misma escenografía tenga sentido en dos óperas como Il trovatore y Medea,  cuya acción se desarrolla en épocas y lugares tan distintos, se ha trasladado a la época moderna pero prescindiendo de ubicarla en un lugar y un tiempo en concreto  (al menos eso se desprende del variado vestuario de Alejandro Andújar) y parece lógico que haya sido así, aunque reconocía Gerardo Vela (encargado tanto de la dirección de escena como de la escenografía) que se había inspirado en estampas de Mogadiscio, Afganistan o el Líbano, “edificios destruidos, huecos, quemados, construcciones inacabadas, envueltos en una atmósfera fantasmal, con la ausencia del hombre, que sólo los transita velozmente… Las huellas y heridas ocasionadas por el tiempo en el espacio son producidas principalmente por el hombre, por la historia, por la política, por la guerra”. La utilización de proyecciones (magnifico el trabajo de Álvaro Luna)  y la eficaz y sugerente ilumionación de Juan Gómez Cornejo ha sido todo un acierto, en cuanto al espacio escéncio resultaba atractivo  a la vista, me gustó estéticamente ese aire industrial, y resultaba muy funcional permitiendo con variaciones en la disposición de los decorados evocar lugares y situaciones distintos, tenía también su porcentaje de espectacularidad (esa especie de salida de estación de metro o lo que fuera, con una escalera hundida en el escenario  se aprecia mejor desde la altura). Cumplía sobradamente con el ambiente de nocturnidad y opresión que planea musicalmente por toda la ópera y distinguía con claridad los dos bandos enfrentados, representados por el conde de Luna y Manrico. Los gitanos aparecen por primera vez en escena como una especie de refugiados políticos, con maletas en un lugar que bien pudiera ser ser una estación de tren, mientras que los seguidores de Fernando de Aragón visten ropas oficiales y aparecen como el instrumento de opresión del poder establecido. Inexplicablemente el director de escénica recibió abucheos, aunque por un sector muy reducido de público que se quiso hacer notar demasiado, al final no pudieron imponerse a los aplausos que fueron ampliamente mayoritarios, me parece injusto que propuestas en las que se aprecia un trabajo detrás se abucheen de esta forma, no estábamos ante una tomadura de pelo, pero siempre hay quien tiene afán de protagonismo. Fueron los mismos que bravearon con desmesura al, por otra parte, buen conde de Luna de Juan Jesús Rodríguez que sustituía al indispuesto Sebastián Catana, por un momento tuve la sensación de haber vuelto de las "claques", estas reacciones desproporcionadas no favorecen a los cantantes noveles en proyección.

Encarnaba a Leonora la soprano Maria Agresta y me sorprendió gratamente, el trimbre, de soprano lírica, es muy hermoso, aterciopelado y su línea de canto muy pulida, recurriendo a bonitas regulaciones y filados, una grandísima Leonora. Jorge de León, tenor habitual de Les Arts (Leonardo de La Bruja, Paco de La Vida Breve, Radames, Don José, Turiddu, Cavaradossi, Le Cid) debutaba en el complicado papel de Manrico, como ya he dicho otras veces no es un tenor que me llegue especialmente pero hay que reconocer que cumplió más que sobradamente con las exigencias de "In quella pira" y que estuvo realmente bien en el último acto, si puliera un poquito más la línea de canto sería un Manrico ideal. Azucena estuvo encarnada por la mezzosoprano eslava Ekaterina Semenchuk tambien me sorprendió por expresividad, calidez  y musicalidad, desde mi posición no se apreciaba su caracterización como una anciana, este hecho unido a su timbre hacían de ella una Azucena hasta demasiado sensual (ACTUALIZACIÓN: en la segunda función a la que asistí, en la que estaba ubicado en una butaca próxima al escenario, desapareció todo atisbo de sensualidad y juventud en su aspecto). Y Sebastian Catana que debía cantar el conde de Luna, como ya he dicho, fue sustituido por Juan Jesús Rodríguez, un barítono a tener en cuenta en el futuro, no es que sea un fuera de serie, como por los bravos algunos pretendían hacer ver, pero resolvió el papel con naturalidad y suficiencia. Muy bien estuvo Liang Li como Ferrando, Ilona Mataradze como Ines y Mario Cerdá como Ruiz. Extraordinarios el Coro de la Generalitat Valenciana y la Orquesta de la Comunidad Valenciana dirigidos por un Zubin Mehta que supo cuidar muy bien de los cantantes y que mantuvo un nivel costante durante toda la ópera, dando muestra de sus tablas y conocimiento de esta obra maestra verdiana, sin intentar ser genial pero mostrándose siempre honesto con la partitura, tener un director así es todo un lujo.

En definitiva, una velada inolvidable de la que maac salió más contento que unas castañuelas,  casi todo el mérito es de Verdi y un milagro que con un presupuesto tan tocado se puedan ofrecer cosas así.

Os dejo con un video gentileza del Palau de les Arts:

33 comentarios:

  1. Yo también estuve ayer en el teatro al que tantas veces he acudido, a pesar de no ser valenciano.

    En primer lugar, he de agradecerle al señor Maac su reseña, que siempre- junto con las del amigo Atticus- son interesantes y nos ayudan a comparar y de paso hacernos una idea de lo que acontece por el coliseo del Turia, siempre es un placer leerle.

    Y además "me congratulo" (todo con el debido respeto) de que me hiciera notar junto a otros amigos que me acompañaban la pasada noche. Digo que me congratulo porque yo soy uno de los que abucheó fervientemente la propuesta escénica de Gerardo Vera y, antes de que me acusen de tantas cosas- parece que ahora al aficionado "tradicional" (una acepción dicho sea de paso muy cogida por los pelos) hay que expulsarlo de los teatros- he de decir que no tengo nada en contra de Vera, que tantas buenas noches de teatro (para los que también somos amantes de semejante espectáculo) me ha proporcionado como director artístico del Centro Dramático Nacional, sin ir más lejos, su último trabajo en "La Loba" que se representa estos días en el Teatro María Guerrero. Y tampoco tengo nada en contra de la descontextualización o innovación en este completo arte que es la ópera y en el que, todo aquel que tenga sangre en las venas, de toda la vida ha braveado y abucheado en el que probablemente sea el espectáculo más libre que exista. Pero siempre claro está, dentro de una coherencia y un mínimo de seriedad.

    Mientras los dos primeros actos se podían ver con interés (cogidos con pinzas) los dos últimos me parecen una auténtica tomadura de pelo. No sé a cuento de qué viene que la producción se ambiente en lo que parece el estancado proyecto de Nueva Rumasa, en un espacio residencial abierto y a medio construir (logrando además, que Azucena y Manrico no se escapen) que por otra parte no asemejo a esos conflictos del Líbano que cita el responsable escénico.

    Por lo demás, suscribo la crónica casi en su mayoría y añado que también bravée, pero con algo menos de entusiasmo, al barítono Juan Jesús Rodríguez, una auténtica sorpresa sustituyendo a Catana, un cantante normalito. Después de haber escuchado tantas veces al andaluz en el Teatro de la Zarzuela y en diversas óperas, me reafirmo en que- sobre todo teniendo en cuenta el panorama vocal en el que estamos sumergidos- es un barítono a tener muy en cuenta, máxime cuando tuvo que lidiar con la nueva producción llegando el mismo sábado a Valencia.

    Nuevamente, le felicito desde el máximo de los respetos y me alegro de que se nos oyera, que es lo que pretendemos cuando queremos alabar o criticar a alguien, aunque afán de protagonismo ninguno, simplemente que el responsable lo note.

    Un cordial saludo.

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    1. Como que os oí, estaba prácticamente al lado. A mí la propuesta me gustó bastante y a Azucena y Manrico los identificaba dentro de una especie de cárcel rodeados de alambradas, no tuve la sensación de que se pudieran escapar, claro que es una lectura muy personal.
      Respecto a los abucheos nadie habla de expulsar a nadie sino de reacción desproporcionada, no por el abucheo en sí sino por la insistencia en él cuando ves que no es secundado, te aseguro que la reacción de todos los que estábamos alrededor fue de extrañeza. No sé si viste el Don Giovanni de Jonathan Miller, aquello sí era un despropósito.

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    2. No fui al Don Giovanni porque no me atraía el reparto. En cualquier caso no considero que el abucheo tenga que ser unánime para iniciarlo, puesto que es la única forma de mostrar desaprobación.

      Otra cosa será, algo mucho más inusual, que no se le aplaudiera como paso con Indra Thomas en el estreno de Aída, donde recibió silencio en cada intervención y al final, solo animada por tibios aplausos más de lástima que otra cosa. La cara de decepción fue tremenda, pero si todos aplauden y uno se calla, no se nota.

      A Semechunk por ejemplo (a la que oí en Madrid como Marta) no la aplaudí, pero su intervención no me indignó, simplemente no me dijo nada, aparte de que su material es más propio de una soprano cortita que de una mezzo.

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    3. Si todos aplauden y uno se calla, efectivamente no se nota. Si todos aplauden y uno abuchea qué importancia tiene uno entre mil espectadores, ¿quién es? ¿sabemos su nombre? ¿conocemos su criterio o su experiencia? La respuesta es NO. Por lo tanto: es una molestia,si intentas inciar un abucheo y no eres secundado lo mejor que puedes hacer es callarte de inmediato. Es algo parecido, pero en sentido contratio, a lo que ocurre cuando alguien pretende iniciar un aplauso al finalizar un aria y los demás no le siguen, lo mejor es que pare de aplaudir cuanto antes.

      Ahora bien, si muchos abuchean: ¡Ay amigo! Algo ha fallado, no es un aficionado anónimo, son bastantes aficionados los que han coincidido, quizás no tengan razón pero el número es significativo.

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    4. Arian, espero que no te lo tomes a mal, no quiero decir que dude de tu criterio, el ejemplo que he puesto es abstracto.

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  2. Así mismo, he de comentar que Juan Jesús Rodríguez no es un cantante novel e incluso ha tenido cierto predicamento en Italia donde ha tenido bastante éxito en este mismo papel en plazas como el Massimo di Palermo o el Maggio Musicale Fiorentino (ya se sabe que nadie es profeta en su tierra).

    Y comentar que la Pira que Jorge de León cantó (bastante bien, por cierto) estaba en su escritura original, a tono y con el cierre en Do, que además logró prolongar durante varios segundos.

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    1. Gracias por la puntualización, es verdad que Juan Jesús Rodríguez ya lleva años, pero lo desconocía.

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  3. Gracias por la crónica Maac, me viene bien para decidirme a ir, que me gusta a mi un Trovatore (y a mi madre un Jorge de León)

    Ah! La española quedó 10ª y ganó Suecia, no te perdiste nada... :P

    Bss, Antxi

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    1. Jajaja, gracias Antxi por la información. Yo tengo entradas para otro día, a ver coincidimos.

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    2. El 19 estaré por allí, en las baratillas del 1° piso ;)

      Bss, Antxi

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  4. Estuve anoche en "Il Trovatore" y me pareció una función de altísimo nivel en su conjunto. Me gustó la propuesta de Gerardo Vera y no entiendo ni comparto el pequeño abucheo, con todo el respeto para quien lo hizo. Creo que cuando alguien trabaja si no te gusta debes guardar silencio en señal de respeto. Y no puede decirse que esta producción no esté trabajada en todos sus aspectos (puesta en escena, vestuario, iluminación, movimiento de actores). Metha estuvo extraordinario en la dirección musical, la orquesta sonó sensacional y se pudo escuchar la preciosa partitura de Verdi en toda su intensidad. Máxima nota también para el Coro. Magistral como siempre. En cuanto al reparto fue muy homogéneo y de muy alto nivel. Jorge de León cantó un "Manrico" iendo de menos a más. Los dos primeros actos fueron los más flojos, por su ya conocida línea de canto, que si no la mejora y sigue acometiendo este tipo de papeles (o locuras como se comenta del "Otello" del año que viene) le llevará a perder su voz en breves años. En cualquier caso, sus agudos son tan brilantes que a mi me encanta escucharlos. Cantó muy bien "In quella pira", aria que técnicamente no es tan difícil de cantar como la gente cree y de ahí al final de la ópera mejoró mucho en todo. Gratísima sorpresa María Agresta, una soprano de altísimo nivel sin llegar a excepcional. Voz bellísima, excelente línea de canto y muy adecuada para una brillante "Leonora". Muy bien. Ekaterina Semenchuck no fue la "Azucena" esperada por mi, y no porque no cante bien, que lo hace, sino porque su voz no me pareció la más adecuada para el papel. Más que una mezzosoprano a mí me pareció en muchos momentos una soprano. Ahí están sus agudos. Aunque quizá esto sea hilar muy fino, pero yo creo que Azucena requiere otro tipo de voz. Juan Jesús Rodríguez fue un brillante Conde Luna, con el mérito adicional de haber llegado a Valencia la víspera. Barítono a tener en cuenta en próximas temporadas aunque me dá la impresión que vá a cantar más funciones de "Il Trovatore" ya que Sebastián Catana, un barítono normalito, vá a seguir "indispuesto". Al tiempo.
    Muy bien "Ferrando" de Liang Li, a quien volveremos a escuchar en "Tristan und Isolde". Un muy buen bajo.También muy bien los secundarios, con especial mención para la "Inés" de Ilona Mataradze. Una ópera muy completa de la que salí encantado, tanto, que pienso volver. Con Metha, la orquesta, el coro y un reparto de este nivel, disfrutar de "Il Trovatore" está asegurado. Quien tenga dudas, quedan muchas entradas, que no dude. No es fácil oir hoy en día un "Il Trovatore" de tanto nivel. Y finalmente agradecer a nuestra Reina su presencia y apoyo a nuestro teatro. Su Majestad si que entiende lo que es la ópera frente a tanto político inepto que quiere cercenar el proyecto del Palau de Les Arts y colocar a su cabeza a cierta señora, que ya trabaja allí, y que lo conduciría a la ruina. Gracias Helga por "los milagros" que haces y ojalá te dejen seguir muchos años. Como Directora Musical eres insustituible y excelente. ¡Animo y enhorabuena!
    Un aficionado a la ópera

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    1. Gracias, aficionado, yo también volveré, creo que ha sido de lo mejor que se ha hecho este año.

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  5. Me pareció simplemente de muy mala educación berrear al equipo de dirección de escena de la manera que lo hizo Arian y su compinche. De verdad fue penoso ya que NADIE le secundó. Me pareció un acto de histeria completamente injustificado e infundado. La dirección de escena, para mi, ha sido lo mejor que ha pasado por el Palau en sus últimas 3 temporadas. Puede gustar menos o más, pero desde luego no se merecía esos berridos histéricos más propio de hooligans que de un público de estreno. Hacerse notar de esa forma infame me parece fuera de lugar y una absoluta falta de respeto hacia todo el elenco, la orquesta, el equipo técnico y al resto del público, que justamente aplaudió a rabiar al final de la velada.
    Por supuesto está que volveré todas las veces que pueda a este estupendo Trovatore de les Arts. Ojalá otros teatros españoles y europeos tengan una producción de esta calidad.

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    1. Gracias Illicopresto por dejar un comentario, lo de "berridos" me parece un poco fuerte, lo que sí es una lástima es que una función tan redonda quede empañada por abucheos esporádicos, son los tiempos que corren.

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  6. Uf yo estuve el sábado en El Liceu, viendo la Adriana Lecouvreur.
    Absolutamente maravillosa la Fritoli y Alagna entregado como siempre a pesar que se anunció una indisposición al final del primer acto, lo que retrasó el cominzo del segundo acto Pons con una voz ya cascada entrañalble, y Dolora Zajick potentísima de voz
    Tenemos entradas para el sábado 16 de junio
    Tengo curiosidad por el montaje después de estos comentarios; yo si ví el Don Giovannide Les Arts, y en la escana final con el comendador solo les falto un parchis en la mesa
    El cúmulo de despropósitos fué la Carmen dirigida ( o no) por un cineasta de prestigo como Carlos Saura . Allí si que me salió el abucheo : peor imposible !
    Gracias por tu crónica que siempre leo con mucho gusto

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    1. No me das del todo envidia porque estuve en el Trovador de Valencia, pero vaya... ya me hubiera gustado poder compaginar ambas representaciones. Ay, la Carmen de Saura, ¡qué horror! Aunque más vale eso que la nada de Miller.

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  7. Una puntualización:
    Azucena no es una anciana. Teniendo en cuenta la edad de Manrico (aproximadamente 16 años, "tre lustri" dice el Conde) y la precocidad de las gitanas, podría estar entorno a los 32-35 años.

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    1. Muchas gracias, joseluis, tienes toda la razón.
      Debe ser por la costumbre de que se le caracterice siempre como una anciana que uno se espera ver una gitana mayor, claro que en la Edad Media una persona de 30 años podría considerarse ya muy mayor, la longevidad media para las mujeres estaba entre los 30 y 40 años.

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  8. Me alegra que disfrutaras, Maac. La verdad es que lo que leo y lo que veo me gusta mucho. Qué daría yo por un Trovatore así en Bcn! Me parece muy elegante. (No como los desgradables intestinos que vimos en directo desde Salzburg, un Julio César por Arte liveWb..)Tenéis un festival estupendo, me encantaría acercarme al Tristan, me gusta Hunter Morris. Ya nos informarás.

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    1. A ver si te animas, sería una buena ocasión para conocernos personalmente, si al final lo haces te recomiendo que adquieras las localidades lo más centradas y delanteras que sea posible, el Auditorio Superior tiene una acústica muy traicionera. Ojalá nos hicieran caso y se decidieran a ofrecer las óperas en versión concierto en la Sala Principal.

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  9. Me alegro mucho que este Trovatore cumpliera la mayoria de las espectativas. Es una de las òperas de Verdi que más me gustan, y al igual que Kalamar, añoro un buen montaje en el Liceu, la última fué de juzgado de guardia.
    Un abrazo,

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    1. Sí que fue mala suerte aquel Desafinatore, lo recuerdo perfectamente.

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  10. Me alegro mucho de que todo haya ido tan bien en este Trovatore, sobre todo porque voy a ir a una de las funciones, aunque aún no sé a cual. Eso sí, al menos no tendré que escuchar abucheos, que es algo que no me gusta excepto en casos extremos de tomadura de pelo (los ya mencionados Miller y Saura). Cuando vaya te digo si lo de Vera me parece una tomadura de pelo o no, aunque supongo que será que no, me fío mucho de tu criterio.

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  11. Pueden dormir ustedes tranquilos que no voy a acudir a ver otra función de Trovatore ni Medea, que comparte dirección escénica.

    Simplemente a modo de cierre, me gustaría comentar algunas cosas. La primera es que pensaba que todos esos prejuicios y elitismos de la ópera hacía tiempo que nos habían abandonado, pero veo que no. Ahora a los estrenos se va a lucirse y a estarse calladitos, tomo nota.

    Y segundo, en réplica al modo taurino (espero que tampoco se me ofenda nadie) a lo que dice Maac, decir que es muy distinto el que alguien aplauda a destiempo o fuera de lugar (por ejemplo, que se corte el ritmo de la obra) a que una vez terminada y en los saludos finales, se reprenda u ovacione (insisto una vez más que las reacciones desaforadas han existido siempre, que pena que se intenten eliminar) a una determinada persona que a mi no me ha gustado. Puede que al de la butaca de al lado sí y lo respeto, no le obligo a que me secunde. Y además, si abucheo es porque me da la gana y no tengo que dar ninguna explicación.

    Afortunadamente, quién me conoce sabe que no soy ningún borrego (hay más berreadores que se suben a un escenario, Vratogna por poner un ejemplo) y que al teatro voy duchadito, vestido de forma acorde, no llevo caramelos, apago el móvil y no comento la jugada en medio de la música, como si hicieron algunos en la zona en la que me movía yo, mi "compinche" (ahora debemos ser mafiosos) y por lo que leo, el señor Maac, que no me debe ninguna disculpa.

    Además, les invito a todos ustedes a que la próxima vez que me suba a un escenario (como cantante, director de escena o musical o cualquier otra índole) cobrando un caché importante, me abucheen, berreen o me tiren tomates, que yo les pondré una diana para que apunten mejor.

    Zanjado el tema, me uno a los deseos de que las funciones sean satisfactorias, como tantas veces lo son en Les Arts (lógico teniendo esos cuerpos estables de tan primera calidad) y avisaré con el tiempo debido la próxima vez que me desplace a vuestro teatro, por si tienen a bien localizarme o no acudir a la función en caso de que me decida a abuchear (cosa que para preocupar aún menos, diré que lo hago muy poco, solo cuando algo me ha indignado).

    Buenas tardes.

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    1. Arian, no hace falta que te justifiques, de verdad. Tienes que entender que haya gente que tenga otros criterios o puntos de vista y no por eso te has de rasgar las vestiduras.
      Hablas de prejuicios y elitismos pero yo lo que veo es que entras en un discurso demagógico, por ahí no me encontrarás.
      "Lo abucheo porque me da la gana y no tengo que dar ninguna explicación", mira... igualito que el Pdte. del Supremo, te retratas tú mismo.
      Lee bien, Arian, yo no he escrito eso de "a destiempo" o "fuera de lugar", me refería a que alguien aplauda, en buen lugar para hacerlo, pero que no sea secundado por el resto del teatro pero siga y siga. Es ridículo ¿verdad? ¿Por qué? Porque se hace notar sin venir a cuento, vuelvo a decir lo mismo, a quién le importa que un espectador aplauda, a quién le importa que dos espectadores abucheen. Yo te lo digo: A nadie. Entonces no molestes a los demás. Abucheas si quieres pero no insistas hasta la saciedad. Lo mismo pienso de los bravos al barítono, excesivos. Pero que a mí me parece perfecto que cada uno se comporte como quiera en el teatro.
      Otra cosa es que se abuchee atronadoramente, no te digo por el 25% del teatro, pongamos por unos 25 espectadores, ya hay una diferencia cuantitativa. Pero también puede abuchear un espectador solo si lo cree conveniente, todo tiene su medida.
      Se nota que eres una persona joven y apasionada, eso es bueno.
      Yo hubiera abucheado también pero por otros motivos y a otras personas que no estaban precisamente sobre el escenario, y no me refiero a la Reina, esos sí que son merecedores de un buen abucheo.

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    2. Cuando digo se comporte "como quiera" evidentemente no me estoy refiriendo a los de los caramelitos y los de los móviles, por cierto, vaya con el del móvil o la alarma del reloj -me lo has recordado-, la dejó sonar hasta que se acabó. Eso sí que es una falta de respeto a los demás.

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  12. Las apariencias engañan, estimado Maac y además, creo no conocerle. En cualquier caso, servidor lleva 10 años acudiendo a teatros y aún le queda mucho que aprender y/o enseñar.

    No pretendo hacer demagogia de nada, simplemente respondo unos post de su blog, que si a usted le molestan, ignoro si hay alguna forma de bloquearme, pero puede usted hacerlo. Mi comentario además, iba por quién me tildaba de borrego.

    Miren, yo o cualquiera de los que acudimos a los teatros y viajamos, muchas veces nos tenemos que morder los labios o reir, ante demasiados bravos u ovaciones a ciertos cantantes. Todos tenemos alguno en mente, alguno ha cantado en Valencia. Pero si en una función en la que yo me lo he pasado bien, alguien bravea a José Cura, yo no le voy a decir que es un cantante "infame" porque ya somos mayorcitos y no le debemos nada a nadie. Y a mi eso si me parece una falta de criterio, pero allá cada cuál.

    Parece que ahora el público tiene que ser un sumiso que aplaude todo, aunque les den gato por liebre. A usted le gustó la producción, explíquemela e igual me convence. O no, pero no le voy a pedir explicaciones.

    Fíjese que incluso estuve hablando en la cena posterior con gente que participó en la función, algunos de ellos miembros de la orquesta, y me decían que efectivamente, no les gustó.

    Eso sí, yo no les voy a insultar ni a llamar "conformistas" ni "paletos". No lo pienso y además, no va con mi carácter.

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  13. Bueno, Arian, ya has visto que he dicho que lo de "berridos" me parecía demasiado fuerte.
    Yo sé lo que tengo que hacer con mi blog, no te preocupes.
    A ver si comprendes de una vez, y espero no volver a repetirlo, que respeto totalmente la libertad de abuchear de cada uno, pero si no estoy de acuerdo con el abucheo no me callo y lo digo en el blog como se lo dije a mis amigos al salir de la función.
    ¡Sólo faltaba que me llamaras conformista! Me han llamado de todo pero conformista sería la primera vez, de paleto tengo bastante, lo reconozco, pero intento mejorar en la medida de mis posibilidades.
    Me encanta la libertad y me encanta la polémica, Arian.

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  14. Me hubiera encantado asistir a ese Tovatore para sacarme el mal sabor de boca de la última edición liceista.
    Una vez vista aquella imposible abuchear otra, cualquier cosa a su lado parece excepcional.
    Pero esperaré a la crónica de Medea a ver como casan las escenografías y vestuario en dos óperas aparentemente tan dispares, aunque Bob Wilson lleva mucho tiempo con esa idea y vende muy bien.
    De todos los cantantes del cast valenciano me interesaba Agresta y me satisface que no te haya defraudado.
    Un saludo y recuerdos para tod@s

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    1. Si hubierais venido hubiera sido ya el colofón.
      Es verdad lo de Robert Wilson y tiene muchísimos seguidores.
      Aún me ronda por la cabeza la idea de ir a Pelléas.
      Saludos.

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    2. Ni se te ocurra venir sin avisar, como has hecho alguna vez.....

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