Como un Orfeo de la tercera edad aparecía la mezzo Anne Sofie Von Otter en Estocolmo a mediados de diciembre, en una producción con dirección escénica del coreógrafo y bailarín Mats Ek y decorados y vestuario de Marie-Louise Ekman y que ha obtenido un renombrado éxito tanto de público como de crítica. Ek presenta a Orfeo como un anciano. Von Otter se alternará en el papel de Orfeo con Anna Larsson, la Fricka del Anillo de Les Arts.
Las representaciones tendrán lugar en la Ópera Real de Estocolmo hasta mazo de 2008, la versión que se representa en la francesa con orquestación de Berlioz, es decir, la misma que grabó von Otter con Gardiner para EMI.
El Orfeo de Gluck ha tenido muchísimas versiones, tanto en escena como en disco, las principales son la del estreno en Viena de 1762, en italiano y para castrato, y la del estreno en París en 1774, para haute-contre y en francés. Además en 1859 Berlioz realizó una nueva versión para ser cantada en París por Pauline Viardot. Es esta versión reorquestada por Berlioz la que siguió Gardiner en su grabación con von Otter, Hendricks, Fournier y la Orquesta de la Ópera de Lyon en 1989. Sin embargo, Gardiner declaró que "en el caso de esta ópera, la primera versión es la mejor: nadie, ni el mismo Gluck, ni Berlioz, ni ninguno de los que han efectuado arreglos con posterioridad, han podido mejorar el Orfeo de 1762, muy inspirado y de proporciones "barrocas" perfectas... De todos modos, llevando por primera vez al disco la versión que Berlioz preparó con tanto cariño para Viardot en 1859, nos encontramos en presencia de una alternativa a la vez fascinante y plausible (en la que la autenticidad es accesoria, podríamos decir), ya que en ella el papel titular debe ser cantado por una mezzo antes que por un -o en ausencia de- un castrado (como en las versiones italianas de Gluck de 1762 y 1767) o un tenor "exageradamente agudo" (como en la versión francesa de 1774)..."
Como muestra de esta grabación propongo la audición del aria "Amour, viens rendre â mon âme", parece ser que Berlioz estuvo tentado de sustituirla por un aria de Écho et Narcisse puesto que, además de que la coloratura le sacaba de quicio, estaba convencido de que no era de Gluck sino del comporitor italiano Ferdinando Bertoni pero ni Viardot ni Carvalho, empresario del Théâtre Lyrique de París, estaban por la labor de eliminar un aria que seguramente iba a gustar al público.
Amour, viens rendre à mon âme
Ta plus ardente flamme;
Pour celle qui m'enflamme,
Je vais braver le trépas.
L'enfer en vain nous sépare,
Les monstres du tartare
Ne m'épouvantent pas.
Je sens croître ma flamme,
Je vais braver le trépas.
L'amour vient rendre à mon âme.
Sa plus ardente flamme;
L'amour accroît ma flamme;
Je vais braver le trépas.
L'enfer en vain nous sépare,
Les monstres du tartare
Ne m'épouvantent pas.
Je sens croître ma flamme,
Je vais braver le trépas.
Objet de mon amour,
Je vais te rendre au jour.
Je brave, je brave le trépas.
Ta plus ardente flamme;
Pour celle qui m'enflamme,
Je vais braver le trépas.
L'enfer en vain nous sépare,
Les monstres du tartare
Ne m'épouvantent pas.
Je sens croître ma flamme,
Je vais braver le trépas.
L'amour vient rendre à mon âme.
Sa plus ardente flamme;
L'amour accroît ma flamme;
Je vais braver le trépas.
L'enfer en vain nous sépare,
Les monstres du tartare
Ne m'épouvantent pas.
Je sens croître ma flamme,
Je vais braver le trépas.
Objet de mon amour,
Je vais te rendre au jour.
Je brave, je brave le trépas.
Tiene buena pinta este Orfeo, lo de la tercera edad me parece una idea estupenda.
ResponderEliminarOrfeo y Euridice, conocida como la ópera de los lamentos, pasa por ser la primera obra de la reforma gluckiana, pese a que oficialmente corresponde a Alceste, siete años posterior, tal honor.
ResponderEliminarEs una obra bellísima, que encuentra en la simplicidad su mejor aliada para la expresividad.
Me encanta la clásica grabación que han dejado de la versión italiana, Horne/Lorengar con las gentes del ROH
Ahora la cuestión ¿Orfeo ya está en la senectud al perder por primera vez a su esposa, o tras la segunda pérdida?
Comienza ya en la senectud.
ResponderEliminarA mí también me encanta la grabación de Solti pero sobre todo por las voces. Esa grabación de Solti es un cóctel de versiones que hoy encontraría difícil justificación pero que marcó época.
En Estocolmo tampoco han sido muy ortodoxos porque han seguido la versión orquestada por Berlioz pero como el director de escena es bailarín han añadido ballets creo que de la versión de 1774.
Pero esta ópera es que me parece que es la más versioneada de la historia, hay también una versión que se hizo para Londres por J.Ch. Bach, se ve que les parecía una ópera muy cortita :-)