domingo, 23 de diciembre de 2007

Verrett - Lady Macbeth

Shirley Verrett nació en Nueva Orleans en 1931, debutó en el Festival de Espoleto con Carmen (1962), hizo su debut en el Covent Garden como Ulrica de Un ballo in maschera en 1966, en La Scala en 1968 como Carmen, y en el Met en 1969 en Samson et Dalila. Su timbre, muy penetrante y cálido, sensual, era extraordinario, su registro muy variado. Su voz se suele catalogar como de soprano falcón, lo que vendría a ser una mezzosoprano con facilidad en el agudo. Su registro central era pleno y corpóreo a la vez que se desenvolvía con soltura en el agudo, mayores problemas presentaba en los graves, los resolvía muy inteligentemente ya que utilizaba una técnica mixta que recurría a las resonancias de pecho si era necesario pero nunca abusaba de ellas. Tenía gran capacidad técnico-vocal, como intérprete era capaz de reflejar mil y un matices en cada personaje. Llego a cantar varios roles dentro de una misma ópera pero en diferentes producciones como Amneris y Aida o como Norma y Adalgisa, incluso dentro de la misma representación, como en Les Troyens en el Met en la que cantó Casandra y Dido (1973).

Interpretó roles de mezzo desde sus inicios pero a partir de 1970 incorporó roles de soprano: Carmen, Ulrica, Lucretia, Dalila, Cassandra y Dido de Les Troyens, Amneris, Eboli, Azucena, Leonora en La Favorita, Orfeo de Gluck, Neocles (L'Assedio di Corinto), Selika en L'Africaine, Lady Macbeth, Madame Lidoine en Dialogues of the Carmelites, Tosca, Norma, Leonore (Fidelio), Iphigénie, Alceste, Médée (Cherubini), Desdemona y Aida.

Hay un personaje que va unido a su carrera desde que lo cantara en La Scala bajo la dirección de Abbado, Lady Macbeth.

Macbeth, estrenada en Florencia, el 17 de marzo de 1847 es la ópera más importante que escribió Verdi entre Ernani (1844) y Rigoletto (1851), período que él mismo denominó "años de galera", años en los que se vio sometido a una actividad demasiado intensa. De la cantante que se le propuso para cantar el papel de Lady Macbeth dijo: "La Tadolini es demasiado buena para este papel. Tal vez eso os parezca un absurdo:... la Taldolini tiene una figura bella y elegante, y yo querría que Lady Macbeth fuera fea y mala. La Tadolini canta a la perfección y yo querría que Lady Macbeth no cantase. La Tadolini tiene una voz estupenda, clara, limpia y potente; y yo querría para Lady Macbeth una voz áspera, sofocada, dura. La voz de Taldolini tiene algo de angélico; y yo querría que la voz de Lady Macbeth tuviera algo de diabólico".

Macbeth y Banco, dos generales del ejército de Escocia encuentran unas brujas que profetizan que el primero será rey y que los hijos del segundo también alcanzarán el trono. En el castillo Lady Macbeth se encuentra leyendo una carta de su esposo en la que le narra lo sucedido:



LADY MACBETH
"Nel dì della vittoria io le incontrai...
Stupito io n'era per le udite cose;
Quando i nunzi del Re mi salutaro
Sir di Caudore, vaticinio uscito
Dalle veggenti stesse
Che predissero un serto al capo mio.
Racchiudi in cor questo segreto. Addio"

Ambizioso spirto
Tu sei Macbetto...
Alla grandezza aneli,
ma sarai tu malvagio?
Pien di misfatti è il calle
della potenza, e mal per lui che il piede
dubbitoso vi pone, e retrocede!
Vieni! T'affretta! Accendere
ti vo' quel freddo core!
L'audace impresa a compiere
io ti darò valore;
di Scozia a te promettono
le profetesse il trono...
Che tardi? Accetta il dono,
ascendivi a regnar.

LADY MACBETH
"En el día de la victoria las encontré...
aún yo estaba estupefacto por lo que escuché,
cuando los mensajeros del rey me saludaron
como señor de Cawdor; vaticinio hecho
por las mismas videntes que
predijeron una corona para mi cabeza.
Esconde en tu corazón este secreto. Adiós."

Ambicioso espíritu
es el tuyo, Macbeth...
Anhelas la grandeza,
¿pero tendrás la suficiente maldad?
¡El camino que conduce hasta el poder
está lleno de crímenes, y pobre del que avanza
con pie dudoso y retrocede!
¡Ven! ¡Apresúrate! ¡Quiero encender
tu frío corazón!
Yo te daré valor para cumplir
la audaz empresa;
las videntes te prometieron
el trono de Escocia.
¿A qué esperas? Acepta el regalo,
siéntate en él para reinar.

Lady Macbeth, es un ser ambicioso y sin escrúpulos, convence a Macbeth para que aproveche la estancia del rey Duncan en su castillo para matarlo y usurpar el trono. Macbeth lo hace pero es presa de remordimientos, el temor no le deja vivir en paz. Se ha acusado de parricidio a Malcolm, hijo de Banco, y Macbeth ha ocupado el trono de Escocia pero no olvida la profecía de las brujas, obsesionado por la profecía y la existencia de descendientes de Banco, propone a su esposa un nuevo asesinato, ésta acepta y Macbeth abandona la escena, su esposa queda sola y comienza el aria "La luce langue", que fue agregada en la revisión que hizo Verdi en 1865:



La luce langue, il faro spegnesi
Ch'eterno corre per gli ampi cieli!
Notte desiata provvida veli
La man colpevole che ferirà.
Nuovo delitto!... È necessario!
Compiersi debbe l'opra fatale.
Ai trapassati regnar non cale;
A loro un requiem, l'eternità.

(con trasporto)

O voluttà del soglio!
O scettro, alfin sei mio!
Ogni mortal desio tace e s'acqueta in te.
Cadrà fra poco esanime
Chi fu predetto re.

La luz languidece y el faro que eternamente
recorre los anchos cielos se extingue!
Noche deseada, vela providencialmente
sobre la mano culpable que herirá.
¡Un nuevo crimen!... ¡Es necesario!
Debe cumplirse la obra fatal.
Los muertos no necesitan reinar;
para ellos ¡un réquiem y la eternidad!...

(Con arrebato)

¡Oh, voluptuosidad del trono!
¡Oh cetro, al fin eres mío!
Todo deseo mortal calla y se cumple en ti.
Caerá exánime dentro de poco
quien fue profetizado rey.


Los sicarios anuncian a Macbeth la muerte de Banco y la huida de su hijo, Malcolm, pero aquél no encuentra paz, sigue obsesionado y decide consultar nuevamente a las brujas que le recomiendan que desconfíe de Macduff y le vaticinan que no será vencido hasta que el bosque de Birman avance contra él y que nadie, nacido de mujer, logrará herirle. Aliviados por la profecía el matrimonio decide asesinar a Macduff y su familia.
Lady Macbeth es presa de remordimientos, lleva demasiados asesinatos a sus espaldas, se ha obsesionado y por las noches sufre insomnio, al mirarse las manos las ve manchadas de sangre, es imposible quitar la mancha por más que se frota. Es la famosa escena del sonambulismo:



LADY MACBETH
Una macchia è qui tuttora...
Via, ti dico, o maledetta!...
Una... Due... gli è questa l'ora!
Tremi tu?... non osi entrar?
Un guerrier così codardo?
Oh vergogna!... orsù, t'affretta!...
Chi poteva in quel vegliardo
Tanto sangue immaginar?

MEDICO
Che parlò?...

LADY MACBETH
Di Fiffe il Sire
Sposo e padre or non era?...
Che n'avvenne?...

DAMA E MEDICO
Oh terror!...

LADY MACBETH
(Si guarda le mani.)
...E mai pulire
queste mani io non saprò?...

DAMA E MEDICO
Oh terror!...

LADY MACBETH
Di sangue umano
Sa qui sempre... Arabia intera
Rimondar sì piccol mano
Co' suoi balsami non può.
Ohimè!...

MEDICO
Geme?

LADY MACBETH
I panni indossa
Della notte... Or via, ti sbratta!...
Banquo è spento, e dalla fossa
Chi morì non surse ancor.

MEDICO
Questo ancor?...

LADY MACBETH
A letto, a letto...
Sfar non puoi la cosa fatta...
Batte alcuno!... andiam, Macbetto,
Non t'accusi il tuo pallor.

DAMA E MEDICO
Ah, di lei pietà, Signor!


LADY MACBETH
Tengo aquí una mancha, ¡siempre!
¡Fuera, te digo, maldita!
¡Una... dos... le ha llegado la hora!
¿Tiemblas?... ¿No se atreve a entrar?
¿Un guerrero y tan cobarde?
¡Qué vergüenza!... ¡vamos, date prisa!
¿Quién hubiera imaginado
que ese anciano tuviera tanta sangre?

MÉDICO
¿De qué habla?

LADY MACBETH
El señor de Fiffe
¿no era esposo y padre?
¿Qué ha sido de él?...

DAMA Y MÉDICO
¡Oh, terror!

LADY MACBETH
(Se mira las manos)
... ¿Es que no lograré jamás
limpiarme las manos?

DAMA Y MÉDICO
¡Oh, terror!

LADY MACBETH
De sangre humana
siempre se siente el hedor... Arabia entera
no podría purificar una mano tan pequeña
con todos sus bálsamos.
¡Ay de mí!

MÉDICO
¿Por qué gime?

LADY MACBETH
Ponte tu ropa
de noche... Ahora, fuera de aquí.
Banquo ha muerto, y quien ha muerto
no vuelve a salir de la fosa.

MÉDICO
¿Y además esto?

LADY MACBETH
A la cama, a la cama...
Lo hecho, hecho está...
¡Alguien llama!... vamos, Macbeth,
no vaya a acusarte tu palidez.

DAMA Y MÉDICO
¡Cielos, tened piedad de ella!

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