Ifigenia, hermana de Crisótemis, Orestes y Electra, es hija del rey Agamenón y Clitemnestra. La diosa Artemisa, como estaba ofendida porque Agamenón había cazado uno de sus venados sagrados, detiene el viento y no deja partir la flota del rey -que debe viajar hacia Troya con objeto de recuperar a Helena- del puerto de Áulide. Calcas, un adivino, afirma que aquél deberá sacrificar a su hija si quiere complacer a la diosa para que ésta deje de hacerles la puñeta. Ifigenia, que estaba en Micenas, es llevada a Aulide para sacrificarla con el pretexto de esposarla con Aquiles. Ifigenia, para no causar perjuicios a los griegos, consiente en ser dada en ofrenda a Artemis. Cuando va a tener lugar la inmolación, la diosa se apiada de ella, la sustituye por un animal, que podría ser un ciervo o un toro, y se la lleva a Táuride, que está bajo el gobierno de Toas , convirtiéndola en sacerdotisa de su templo.
Una vez en Tauride, Ifigenia, sacerdotisa del templo de Artemisa, es la encargada de sacrificar a los náufragos extranjeros que caían en la costa. Orestes -su hermano- y su amigo Pílade, habían sido enviados a Táurida por el oráculo de Delfos para buscar la estatua de Artemisa y evitar que las Euménides persiguieran al primero por haber asesinado a Clintemnestra y su amante. Aquéllos son capturados e Ifigenia debe ser la encargada de su sacrificio. Antes de que el mismo tenga lugar los hermanos se reconocen e idean un plan para escapar: Ifigenia afirma que para sacrificar a los dos prisioneros antes debe purificarlos en el mar porque están contaminados al haber matado uno de ellos a su propia madre. Con ese pretexto sacará también la estatua de Artemisa, y la sacerdotisa aprovechará la ocasión para huir con ellos a Grecia. El plan tiene éxito. Una vez huidos, sufren una persecución de la flota de Toas, entonces aparece Artemisa para protegerlos con la condición de que deben edificar un templo en su nombre en el que Ifigenia continuaría estando a su servicio. La ópera de Gluck no sigue al pie de la letra esta historia.
Una interesante visión del mito en relación a la obra de Goethe podéis encontrarla AQUÍ
Escuchamos a Edda Moser en el Maggio Musicale Fiorentino de 1981 bajo la dirección de Riccardo Muti:
Primer acto:
- Recitativo acompañado "Cette nuit j'ai revu le palais de mon père"
- Aria: "Ô toi qui prolongas mes jours"
Segundo acto:
- La Escena entre Iphigénie y Orestes -el papel que encarnará Domingo y que en el vídeo lo interpreta el barítono Wiliam Stone-: "Je vois toute l'horreur", le sigue el coro de sacerdotisas "Patrie infortunée" hasta el momento previo al aira "Ô malhereuse Iphigénie".
- Aria: "Ô malhereuse Iphigénie"
- Recitativo y aria con coro: "Honorez avec moi ce héros... Contemplez ces tristes apprêts".
Tercer acto:
- Recitativo y aria: "Je cède a vos désirs... D'une image, hélas! trop chérie"
Cuarto acto:
- Recitativo y aria: "Non, cet affreux devoir je ne puis le remplir... Je t'implore et je trremble"
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