lunes, 16 de noviembre de 2009

Liguilla en Wartburg (11)





OLIVE FREMSTAD (1VOTO) nació en Estocolmo en 1871, poco tiempo después su familia emigró a Minnesota, estudió en Nueva York y a los 22 años marchó a Berlín para estudiar con Lilli Lehmann. Debutó como Azucena en Colonia (1895), también cantó en Munich, en Bayreuth y en otras ciudades europeas hasta que la contrató el Met en 1903, estuvo en esta compañía hasta 1914. Cuando escucho a cantantes tan antiguos siempre me asalta la duda de si las deficiencias que se aprecian en sus voces están causadas por las técnicas de grabación de la época, si les que las tomas están realizadas en el ocaso de sus carreras, o si, por el contrario, es que en aquella época se cantaba así. El caso es que la voz de Fremstad, tal como aparece en la grabación de Dich teure Halle es muy agresiva al oído. Las crónicas de la ópera parecen coincidir en que la zona aguda era la más problemática de su tesitura pero también es cierto que las técnicas de grabación de principios de siglo todavía tenían que evolucionar un poquito. Fremstad comenzó como mezzosoprano (Brangäne, Ortrud, Fricka, Venus) pero cuando ya se había establecido en el Metropolitan terminó cambiando a la cuerda de soprano, introduciendo en su repertorio los papeles de Sieglinde, Isolde, Brünnhilde, Kundry, Elsa. Fuera del repertorio wagneriano también cantó Azucena, Carmen, Santuzza, Armida de Gluck, Giulietta de Los Cuentos de Hoffmann, Tosca, Salome.





Obtuvo 6 VOTOS, pero tampoco pasó HILDEGARD BEHRENS (1937-2009), soprano nacida en Friburgo que, antes de comenzar su carrera como cantante, estudió derecho en su ciudad natal. Debutó en 1971 interpretando la Condesa de Las bodas, después consiguió un contrato con la Ópera de Düsseldorf y cuando estaba realizando los ensayos para interpretar el papel de Marie en Wozzeck fue escuchada por Herbert von Karajan. El director, que estaba buscando intérpretes para una futura producción de Salome, la contrató para ser su Salomé en el Festival de Salzburgo de 1977 y para protagonizar el registro discográfico de la ópera para EMI. En 1976 el Covent Garden debutó como Leonre (Fidelio) y en el Met como Giorgetta (Il Tabarro), allí introdujo en su repertorio el papel de Brünnhilde y posteriormente fue Isolda. También destacó como intérprete de Leonore, Elektra y la Tintorera. Behrens, que fue la soprano dramática de los setenta y ochenta del siglo XX conjugaba presencia dramática con personalidad e inteligencia vocal, brillaba en los registros medio y alto pero no tenía las características propias de sopranos dramáticas como Flagstad por amplitud vocal o Nilsson por potencia. También destacó como Ariadne, Emperatriz y Tintorera en La mujer sin sombra, no se prodigó mucho en el repertorio italiano, su personaje más emblemático en el mismo fue Tosca.

Pasa la 29 con 15 VOTOS. Tres competidoras más:





8 comentarios:

  1. Entre la 31 y la 32, voto a la 31, solamente por reivindicar a las muertas, en un acto de necrofilia musical.
    La 32 también me ha gustado.

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  2. Voto por la 33.La voz no es demasiado atractiva pero llega a todos lados con indudable solvencia.Interpretativamente la encuentro una Elisabeth algo antipática.La 32 tuvo sus años de gloria en los que todos andábamos loquitos por ella pero hay que decir que a pesar de lucir una hermosa voz no se halla cómoda al final del fragmento(todo y ser una grabación de estudio).la 31 canta con un tempo excesivamente lento para un fragmento que requiere un trato opuesto.La escuela(será prejuicio mío) pero resulta rematadamente antigua.

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  3. Voto a la 32. Las otras dos, seran las grabaciones, pero no me gustan tanto.

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  4. Decía más abajo que no se puede obviar el acompañamiento orquestal. Resulta evidente para no darle mi voto a la 31. La 33 no es nada atractiva. Por tanto mi voto a la 32: bella, potente, generosa y muy bien acompañada.

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  5. Hay que intentar obviarlo porque teóricamente estamos juzgando voces, si hubiera querido valorar la orquesta no hubiera amputado la introducción orquestal. Se puede obviar, Barbe, si yo lo hago tú también puedes hacerlo, de hecho sé que, como todo el mundo, de vez en cuando haces abstracción de los detalles que menos te interesan para centrarte en lo que más placer físico o intelectual te produce. Además es injusto que una señora tenga una banda de música, otra la orquesta de la ópera de Lyon en directo y otra la Filarmónica de Viena en estudio y se valore con el mismo criterio. No podemos juzgar igual lo que en sí mismo es desigual.

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  6. Tú mismo lo has dicho, maac: 'No podemos juzgar igual lo que en sí mismo es desigual'
    No es imposible pero resulta difícil y contraproducente juzgar una voz en estado puro, sin valorar la interpretación: vocal (matiz, énfasis, psicología,...) y orquestal (tempo, dinámica, ataque, arropamiento,...)

    En todo caso seguro que al final no gana ni una mediocre cantante ni una mediocre orquesta.

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  7. Pues estoy de acuerdo con Barbebleue, todo influye y seguramente a favor -en mi modesta opinión- para votar a la 32. Pero intentando hacer abstracción del acompañamiento orquestal, de la calidad del sonido, creo que me gusta más, decir que es mejor no me atrevo. Así que voto por la 32!

    Por cierto, Dandini, quizás necesite más de una escucha pero no aprecio esa incomodidad al final del fragmento de la 32, tendré que reescucharla.

    Buen lunes a todos!

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