sábado, 15 de marzo de 2008

El culebrón del Teatro Romano de Sagunto

Vista de Sagunto, el teatro romano en primer término y el castillo detrás.


El Teatro Romano de Sagunto, con la resolución del Tribunal Supremo que ordenó la reversión en un plazo de 18 meses de la obras proyectadas por Grassi y Portaceli en 1985, se encuentra en un callejón sin salida. Y todo es fruto del empecinamiento de una persona y de la circunstancia de que teóricamente la Ley de Patrimonio vigente cuando se iniciaron las obras no permitía la remodelación, con la Ley de Patrimonio actual no habría ninguna complicación.
No quiero entrar en la polémica sobre si su reforma debió o no llevarse a cabo, recordemos que el pueblo de Sagunto dijo sí en referéndum y que la misma fue candidata y finalista en prestigiosos premios de arquitectura. El mal ya está hecho y ahora habrá que buscar la mejor solución, tratar de compatibilizar el cumplimiento de las resolución judicial con el menor impacto sobre las ruinas del monumento. El caso es que los arquitectos autores del proyecto siempre hablaron de la posibilidad de vuelta atrás una vez efectuadas las obras, era uno de los argumentos que más se utilizaron en su día para justificar la intervención.
Los políticos no encuentran una solución a un problema que es/fue más de índole jurídico-política que otra cosa, ahora hay ya una sentencia firme que debe ejecutarse. El PP, uno de los máximos valedores de la idea de revertir las obras, que ha estado utilizando la polémica sobre el teatro como arma electoral desde los tiempos en que Zaplana era candidato a la presidencia de la Generalitat, es hoy uno de los defensores de la no intervención (salvo en el mismo municipio afectado, en el que se mantienen las divergencias entre los partidos políticos). Tanto es así que parece que han intentado hacer oídos sordos y mantener la programación del teatro durante este año, pero el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad ya les ha pegado un toque, a instancia de la parte demandante, hay que actuar.
El órgano consultivo de la Generalitat Valenciana en materia cultural, el Consell Valencià de Cultura, también es contrario a la reversión, significativo es el resultado de la votación, de los diecinueve votos emitidos sólo uno se mostró a favor de que se deshiciera la reforma. Al menos mantiene una línea coherente, pues desde el principio defendió la intervención.
El colectivo de arquitectos, restauradores y estudiosos del arte, mayoritariamente, mantiene que la reversión destrozará el monumento, muy deteriorado tanto por el paso del tiempo y como por la utilización de sus bloques de piedra para la construcción de las casas del pueblo de Sagunto en épocas pasadas, incluso algún estudioso afirma que hay pruebas -albaranes de entrada de materiales saguntinos- de que el Palacio de la Generalitat se amplió durante los siglos XV y XVI con sillares que provenían de Sagunto. Por su parte, los profesionales del mundo del teatro no quieren que desaparezca una de las fuentes de su sustento.
Menudo papelón, casi nadie quiere volver atrás pero hay que hacerlo y lo peor es que las obras, según los expertos, son irreversibles. La pregunta que me planteo es: ¿Hasta dónde hay que retroceder? ¿Después de las intervenciones de los años cincuenta, sesenta y setenta o a antes de éstas?

Os dejo las fotos que ilustran cómo ha evolucionado el Teatro de Sagunto a lo largo del pasado siglo:

El Teatro antes de las intervenciones de los años sesenta y setenta:


El teatro tras las intevenciones de los años setenta:


El teatro tal y como está hoy:

Teatro de Aspendos, Turquía ¿El modelo?



Y para finalizar, como no podría ser menos en este blog, algo de música. Y como va de romanos nada mejor que L'incoronazione dei Poppea de Monteverdi. Grabación dirigida René Jacobs con Curtis Ryam como la nodriza Arnalta: "Oggi sarà Poppea"



Oggi sarà Poppea
di Roma imperatrice;
io, che son sua nutrice,
ascenderà delle grandezze i gradi:
no, no, col volgo io non m'abbasso più;
chi mi diede del tu,
or con nova armonia
gorgheggerammi il «vostra signoria»;
chi m'incontra per strada
mi dice: «fresca donna e bella ancora»;
ed io, pur so che sembro
delle sibille il leggendario antico;
ma ogn'un così m'adula,
credendo guadagnarmi
per interceder grazie da Poppea:
ed io fingendo non capir le frodi,
in coppa di bugia bevo le lodi.
Io nacqui serva, e morirò matrona.
Mal volentier morrò;
se rinascessi un dì,
vorrei nascer matrona e morir serva.
Chi lascia le grandezze
piangendo a morte va;
ma, chi servendo sta,
con più felice sorte,
come fin degli stenti ama la morte.



1 comentario:

  1. El PP quiso crearles este problema a los socialistas y ahora, tras muchos años de lentitud administrativa, se han encontrado con que el problema lo tienen ellos.

    Por otra parte, recuerdo como, durante las últimas obras, había muchas voces discordantes entre colectivos culturales, mientras que ahora todos parecen estar de acuerdo en que no hay que revertirlas. Todos menos el tribunal, vamos.

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