Han pasado casi seis meses desde la última entrada sobre las mujeres del Anillo, ante la proximidad de las fechas en las que se va a ofrecer la Tetralogía seguida en España ya va siendo hora de que complete la serie con el último personaje que queda, entre las mujeres es la más complicada de tratar por la evolución que sufre, comienza siendo un apéndice de Wotan y termina convertida en un ser totalmente independiente cuya acción determina el destino de todo cuanto tiene a su alrededor.
"... el dios anhelaba saber: descendí al seno del mundo, con el encanto del amor forcé a la Wala, perturbé el orgullo de su sabiduría, para que ahora me hablara. Nuevas recibí de ella; pero de mi atesoró ella una prenda: la mujer más sabia del mundo me alumbró, Brünnhilde, a ti. Con ocho hermanas te crié" (Monólogo de Wotan en el segundo acto de La Walkyria)
Brünnhilde no aparece en el Prólogo, y es que todavía no ha nacido. Sin embargo, es en el Prólogo donde se encuentra la razón de su existencia, su nacimiento tendrá su origen en el plan -la voluntad- ideado por Wotan para recuperar el poder perdido tras el robo del oro. Ya lo vimos cuando hablábamos de las otras walkyrias.
De entre todas la walkyrias es Brünnhilde -si no en la mitología, sí en la Tetralogía wagneriana- la única que procede de Erda -Wala-, la preferida de Wotan, su ojito derecho -eso es mucho, más de lo normal si tenemos en cuenta que le falta uno-; de él ha heredado la fuerza y el poder de su voluntad, la acción. Erda le ha transmitido la sabiduría, lo que le llevara, a diferencia del resto de sus hermanas, a cuestionarse la sumisión a las órdenes del padre.
Wotan + Erda / Acción + Sabiduría, he ahí la fórmula mágica que logrará la salvación universal. Y es que Erda no estaba capacitada para la acción, no podía detener el curso de los acontencimientos, mientras que Wotan, que sí podía, estaba cegado por la sed de poder, que había conducido los acontecimientos a una situación difícilmente sostenible.
Tanto en su evolución dramática, como en la musical, podemos distinguir tres Brünnhildes, una por jornada. Para ir dosificando hablaremos de cada una de ellas por separado en distintas entradas. Ahora nos vamos a centrar en su primera aparición, es fantástica la manera en la que Wagner enlaza en La Walkyria el final del primer acto con el inicio del segundo, a pesar del descanso no hay solución de continuidad, voy a juntarlos para finalmente escuchar la entrada de Brünnhilde. Es la versión de Furtwängler en 1954 en estudio con Suthaus -era su tenor-, Rysanek, Mödl y Frantz, Anillo, que de completarse, seguramente hubiera sido el de referencia en estudio.
La entrada de Brünnhilde en escena tiene lugar al inicio del segundo acto; cuando se abre el telón aparecen ante el espectador Wotan y Brünnhilde completamente armados entre colinas rocosas, así reza el libreto; tras una pequeña introducción, que enlaza con el final del primer acto -la huida de Siegmund y Sieglinde bajo la persecución de Hunding-, aparece el motivo de las walkyrias, entonces Wotan da la orden a la hija para que en el enfrentamiento entre Siegmund y Hunding aquél obtenga la victoria, Brünnhilde se muestra jubilosa y entona los famosos "¡Hojotojo! ¡Hojotojo!". Pronto cambiará todo, Fricka se acerca.Terrible comienzo para la soprano que interpreta a la walkyria: abre la boca por primera vez y se enfrenta con saltos de octava del Do4 al Do5 y trinos imposibles. Escuchamos este fragmento en las voces de Birgit Nilsson y Theo Adam en el Festival de Bayreuth de 1967, dirige enérgicamente Karl Böhm.
Martha Fuchs realiza un límpido trino en 1935 al lado de un joven Hotter como Wotan:
Frida Leider no se le quedaba atrás en 1938:
Y ahora por Kirsten Flagstad en 1936, en aquellos años en un estupendo estado vocal:
Para terminar escuchamos a la que será Brünnhilde en la Tetralogía del Palau de les Arts, Alexia Voulgaridou, digo... Jennifer Wilson, con Juha Uusitalo como Wotan. Florencia 2007, dirige Mehta:
Conforme vayan sucediéndose las entregas podremos escuchar otras Brünnhildes, lo digo porque no traer a Varnay en el fragmento de inicio del segundo acto de La Walkyria casi parece un pecado.
Hola. Solamente una cuestión, colateral en el hilo de hoy, pero que me ha llamado la atención por la forma en la que la has enunciado. Dices que Ludwig Suthaus era el tenor de Furtwängler. Yo me hice wagneriano precisamente escuchando muchas veces la Walkiria en estudio de Furtwangler y les tengo mucho cariño a todos los cantantes participantes en la grabación, de los que sin embargo no he encontrado nunca apenas información, especialmente de Ferdinand Frantz y Ludwig Suthaus -siempre ahogado, siempre incandescente. ¿Puedes contarme algo más, o al menos decirme por qué Suthaus era el tenor de Don Wilhelm? Un saludo y felicidades por el post.
ResponderEliminar(José)
Qué bien que por fin te decidas a meterte en harina con la rebelde Brünnhilde.
ResponderEliminarLa entrada de Brünnhilde en el segundo acto con su saludo guerrero es una genialidad electrizante, por más que a la cantante de turno le suponga un trago y una tentanción para soltar varios berridos. Creo haber leído alguna vez que Wagner sufrió mofas por parte de críticos por emplear onomatopeyas al estilo de los "Hojotoho" o los "Weiga! Waga!" del Oro del Rin, que no significan nada, pero que con la música se dibujan como figuras muy expresivas o descriptivas. Igual de genial que la forma en que irrumpe el motivo de las Walkyrias - me ha gustado mucho cuando has hablado de que no hay solución de continuidad pese al descanso - y que parece venir desde lejos (ese efecto lo conseguía a la perfección Kna).
Por cierto, cómo mola la foto de Furt sobre fondo negro. La empleé como avatar en un foro, jeje.
José, el señor que escribe arriba de este comentario hubiera sido la persona idónea para contestarte, seguramente no ha querido decir nada porque no la pregunta no era genérica, pero ya me hubiera gustado que lo hubiera hecho. Decía que Suthaus era el tenor de Furtwängler para lo poco que grabó realizó dos colaboraciones cruciales en estudio con Furtwängler, Tristan e Isolda y La Walkyria, ambas para EMI; yo no sé si será cierto, habitualmente se lee por ahí que era el tenor favorito de Furt, igual si no hubiera sido por este director en estudio no existiría grabaciones del tenor. Cantó Loge con Kna en los Anillos del 56 y 57 -parece ser que en el 58 ya no cantó porque tuvo problemas con Wieland Wagner-, en el Anillo de Furt con la Orquesta de la Rai fue Siegfried.
ResponderEliminarEs el típico cantante que empezó como barítono, aunque sin debutar, y después cambió a la cuerda de tenor. Lo has descrito muy bien, "siempre ahogado, siempre incandescente". Desata odios y pasiones.
Muchas gracias por los datos, Maac. Yo soy de los que quieren a Suthaus, posiblemente por estar asociado a esa grabación para mí iniciática. Y me enciendo con él en sus arrebatos de amor y de ira, y sufro con él en su lucha con la orquesta y los agudos.
ResponderEliminarEl señor del mensaje de arriba me tiene sobrevalorado y pensaría que soy capaz de escribir una tesis doctoral sobre la relación Furtwängler-Suthaus. Pero la verdad es que yo sé lo que ha escrito él, en todo lados aparece que era su predilecto, en alguna ocasión lo habría manifestado, e incluso él ha llegado a una conclusión más, quizá si no es por Furtwängler lo conoceríamos mucho menos. Cuando se habla de Suthaus se suele valorar dos cosas sobre todo: el color oscuro de la voz propio del heldentenor y que era muy idiomático. Yo para esta Walkyria del 54 hubiera elegido a Wind, que ya cantaba el papel… pero se ve que el flechazo con Suthaus fue muy fuerte.
ResponderEliminarBueno, pero si grabó tan poco, está bien que quede alguna constancia de él. Y si el maestro lo eligió, yo también lo doy por bueno. Gracias a ti también, Golaud (José)
ResponderEliminarCASI NO, ES UN PECADO, pero bueno, ante este magnífico inicio de la serie dedicada a Brünnhilde, solamente tengo que rendirme.
ResponderEliminarFantástico inicio Maac. Ansioso me tienes, esperando el resto.
¡Hojotoho! Buena entrada la tuya, maac. Esperamos la evolución de la valquiria.
ResponderEliminarNota: los que critican ese Tristan de Furt por Suthaus, tienen poca munición...
Por mí, estando Furt a la batuta, como si quieren poner a Raphael a cantar.
ResponderEliminarMe parece muy sensato lo que dices, José. Tienes razón, Suthaus tiene poca grabaciones y merece la pena conservarlas, además que si lo escogió Furt por algo será.
ResponderEliminarTambién estoy de acuerdo con Titus, jeje.
Bueno, bueno, Raphael, pase. Pero como escoja a Bosé, conmigo que no cuente.
ResponderEliminarme ha gustado mucho esta entrada Macc, la Brünnhilde me cae genial.
ResponderEliminar