domingo, 5 de abril de 2009

Al Ayre Español de Bach

Para ilustrar la entrada aprovecho unos videos de Al Ayre Español que Andayya ha colgado en YouTube, no sé de dónde ni cuándo están grabados, debe ser hace poco porque hoy Carlos Mena llevaba la misma corbata que luce en ellos, la principal diferencia es que hoy no teníamos tiorba en el Palau de la Música de Valencia.



Cuando uno se dirige al Palau de la Música para escuchar una obra del calibre de La Pasión según San Mateo por una orquesta que -a pesar de que tiene ya veinte años y reconocido prestigio nacional (Premio Nacional de Música en 2004) e internacional (conciertos en Amsterdam, Bruselas, Berlín, Viena, París...) y una ya amplia trayectoria discográfica- se llama Al Ayre Español, y además está acompañada por un coro llamado "Vozes de Al Ayre Español" y con apellidos en los solistas vocales como Mena, Martín-Royo e Hinojosa, tiene una sensación extraña por la paradoja que supone ver unidas las palabras Bach y Español. Para la agrupación de Eduardo López Banzo es una apuesta muy arriesgada, se habían atrevido a atravesar las fronteras de lo hispano interpretando óperas de Haendel, pero éste puede ser muy mediterráneo, un paso adelante supuso afrontar El Mesías, atreverse con Bach suponía entrar de lleno en el repertorio germánico, toda una osadía. Ha valido la pena correr el riesgo. La agrupación de López Banzo ha demostrado que tiene la calidad suficiente para enfrentarse a lo que le echen. Ya era hora de que hubiera una agrupación orquestal española que pudiera afrontar la interpretación de cualquier composición barroca desde una perspectiva historicista -¡cómo odio esta palabreja!- con este grado de calidad. No me olvido de la Orquesta Barroca de Sevilla, lo que pasa es que no conozco mucho de ella, a ver si un día de estos viene a visitarnos.

En la primera parte me he aburrido un poco. Aunque si queréis que os diga la verdad no sé si la culpa fue mía. A veces la culpa no es del intérprete sino del espectador: falta de concentración, cansancio... Todo ha sido distinto en la segunda parte, la música fluía con más naturalidad, el coro sonaba más empastado, seguramente era yo el que había cambiado. Me gustaría poder volver a vivir la experiencia para averiguar si realmente la culpa fue mía, pero me temo que va a ser imposible.

Joan Martín-Royo, que hace poco fue el Guglielmo del Così de Les Arts, ha sido un Jesús muy correcto pero que no ha destacado especialmente, lo mismo podría decir del evangelista de Thomas Walker si no fuera porque su protagonismo y ocasiones de lucimiento han sido mayores. Hubiera preferido a Christoph Prégardien, quien ha cantado con López Banzo el evangelista en otras ciudades. La parte de soprano ha sido interpretada por Maria Hinojosa, no me ha parecido una mala cantante, ha dado todas las notas y es musical pero tiene un timbre muy irregular, continuamente mutable y que no se proyecta muy bien, una lástima a ver si consigue corregir estos pequeños defectos. Mejor han estado el tenor Helge Ronning y el bajo Denis Sedov, su aria "Komm süsses Kreuz" con acompañamiento de la viola da gamba ha sido uno de los grandes momentos de la tarde-noche. Era la primera vez que escuchaba en directo al contratenor Carlos Mena, lo admiraba desde aquel recital que grabó en 2002, De Aeternitate, y no me ha defraudado en absoluto, su voz es ideal para los momentos de recogimiento y abandono tan presentes en las pasiones de Bach, la soldadura entre el registro grave y el agudo, verdadero talón de Aquiles de los contratenores, la tiene bien resuelta y además es muy musical, qué más se puede pedir. No quisiera terminar sin decir que la labor del coro Vozes de Al Ayre Español, dirigido por el belga Bart Vandewege, me ha parecido excepcional, sobre todo si tenemos en cuenta que es de muy reciente creación -comenzó su andadura profesional a finales del 2008-.

Al salir, lo que me pasa siempre que escucho a Bach en directo, durante un buen rato las melodías no cejan en su empeño de viajar y jugar por mi cabecita, lo cual me llena de placer.

Nos despedimos con el Dúo "So ist mein Jesus nun gefangen" interpretado por María Espada, cuya parte ha sido cantada hoy por María Hinojosa, y Carlos Mena y el Coro "Sind Blitze, sind Donner":




6 comentarios:

  1. Gracias por poner esto. Me ha hecho gracia una cosa que has dicho, lo de que "las melodías no dejaban de rondar por tu cabeza", es que el otro día, y escuchando otro fragmento de la Pasión según San Mateo, al terminar pensaba que esa música de Bach, era cómo si me la inyectasen en vena, la sentía sin oírla, y así mucho rato, lo que tu dices, un placer.

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  2. Estupenda versión española de la obra cumbre bachiana. Todo un atrevimiento, sí, del que salen airosos. Puestos a pedir, tal vez algo más de dramatismo y hondura expresiva especialmente en los tutti (quizá más rodaje...)

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  3. Pues a mí el exceso de expresión del Evangelista no me ha gustado. Creo que era un recurso para enmascarar la falta de talento. Además en el registro agudo chirriaba. Me ha parecido un papel demasiado importante para este cantante. Y es fundamental en la obra...

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  4. Nibelungo, tampoco a mí me convenció el Evangelista, quise decir que tuvo momentos afortunados y otros no tanto, por eso también decía que hubiese preferido a Prégardien, que es quien lo estuvo cantando con López Banzo el pasado mes de marzo.

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  5. También estuve allí6 de abril de 2009, 23:29

    Maac, comparto en casi todo tu completa crónica. Mi icono de evangelista, en estilo, recogimiento y pasión es Mark Padmore. Parece que Walker lo intenta, pero no lo consigue y en eso coincido con Nibelungo.
    Salí con la extraña sensación de sentirme orgullosa de una orquesta y coros españoles que sobrepasaron con creces lo que esperaba de ellos, después de haber oído unas diez pasiones dirigidas e interpretadas por los mejores, y de haber escuchado recientemente la misa en Sim por la Capella Amsterdam y la Orquesta del siglo XVIII.
    No tanto me aburrí en la primera parte como que me sentí analítica, expectante y , efectivamente, todos se crecieron en la segunda, elevando la música y haciéndola suya.
    Carlos Mena en toda su actuación me pareció el mejor,sin duda, pero en Erbarme dich, mein Gott, resultó exquisito, perfectamente acompañado por la violinista solista. El bajo en su última aria también se creció, pues durante la obra fue el que más dejó que desear en afinación y ajuste. Me dio la impresión de que no había cantado demasiadas veces la obra. Hacía tiempo que no oía un coro español, excepción del de la Generalitat, cantar con ese empaste y homogeneidad, aunque quizás en el último coro le hubiera pedido algo más de Pasión.
    Magnífica noche que precede a una semana santa llena de irreverentes Turandots, y estupenda entrada que te agradezco.

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  6. Al Ayre Español estrena su nuevo canal en Youtube con grabaciones de conciertos en HD, noticias de actualidad, fechas de próximos conciertos y últimos lanzamientos discográficos: www.youtube.com/alayreespanol

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