Hoy finalizamos el recorrido por Las Siete Últimas Palabras de Nuestro Señor en la Cruz (Die sieben letzten Worte unseres Erlösers am Kreuze) de Haydn, el transcurrir de la Semana Santa, desde el Domingo de Ramos hasta hoy ha servido de excusa para ir recreándonos día a día en cada uno de sus movimientos, aunque cualquier época es buena para escuchar este tipo de música parece que es ahora cuando más apetece.
7 Vater! in deine Hände
empfehle ich meinen Geist.
In deine Händ’ o Herr,
empfehle ich meinen Geist.
Nun steigt sein Leiden höher nicht,
nun triumphiert er laut und spricht:
nimm, Vater, meine Seele,
dir empfehl’ ich meinen Geist.
Und dann neigt er sein Haupt, und stirbt.
Vom ewigen Verderben
El oratorio finaliza con Il Terremoto en tiempo "presto e con tutta la forza", un fragmento que -en realidad podría decirse que la obra al completo- en las versiones orquestales, para cuarteto de cuerdas o en la reducción a piano podría calificarse como música programática, en un sentido más descriptivo que evocador, y que en su versión oratorial viene a decir más o menos: Ya se ha ido, desde las profundidades de la tierra resuena: ya se ha ido. ¡Tiembla Gólgota! ¡Tiembla! Ha muerto en tus alturas. O Sol, huye y no ilumines este día, Tierra, ábrete, pues sobre tí permanecen los asesinos; antepasados, ascended a la luz desde vuestras tumbas porque la tierra que os cubre está manchada de sangre.
Il Terremoto
Er ist nicht mehr
Er ist nich mehr
Der Erde Tiefen schallen wieder:
Erzittre Golgatha, erzittre,
Er starb auf deinen Hönen,
o Sonne fleuch,
und leuchte diesem Tage nicht;
zerreisse, Land, worauf die Mörder stehen;
ihr Gräber thut euch suf,
ihr Väter steigt an’s Licht,
das Erdreich das euch deckt
ist ganz mit Blut befleckt.
M'ha semblat una idea excel·lent la d'anar penjant cada dia d'aquesta Setmana Santa una de les “Les set últimes paraules...”, de Haydn, així com la tria de les diferents pintures sobre el tema de la crucifixió amb què que les has anat il·lustrant, de les quals no puc deixar de comentar-te que la de Rubens és una de les que més m'agraden sobre aquest tema de tota la història de la pintura.
ResponderEliminarL'enhorabona més sincera, maac.
Gracias, Assur, coincido respecto al de Rubens, sorprende que ese Cristo mantenga una actitud activa, de no aceptación de su destino, produciendo más la sensación de impotencia que la de resignación.
ResponderEliminarI'm glad this helped.
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