SEGUNDO ACTO. Habíamos visto en el primer acto que Partenope había declarado la guerra a Emilio, así que este segundo acto comienza en el campo de batalla, donde se encuentran las tropas capitaneadas respectivamente por Partenope y Emilio. En el fragor de la batta Armindo salva la vida a Partenope mientras que Arsace, además de hacer lo mismo respecto a Rosmira (Eurimene), captura a Emilio, la batalla ha terminado, las tropas de Partenope han vencido. Eurimene (Rosmira), delante de la reina y resto de protagonistas, deja una vez más en ridículo a Arsace al afirmar que ha sido ell/ella, y no Arsace, quien ha capturado a Emilio; Arsace permanece en silencio, atenazado por la amenaza de que Rosmira (Eurimene) descubra el secreto que ambos mantienen, además Eurimene (Rosmira), que parece no tener otro objetivo que la venganza, lo reta en duelo. Partenope vuelve a salir en defensa de Arsace y ordena que Eurimene (Rosmira) sea hecho prisionero.. Armindo y Emilio muestran su desprecio ante la actitud cobarde de Arsace y entonces Eurimene (Rosmira) lo defiende ante el desconcierto de aquéllos: “della Natura alti arcani son questi”. También Arsace defiende a Eurimene (Rosmira) delante de la reina, que tampoco deja de sorprenderse, y ésta decide liberar a Eurimene (Rosmira). Quedan solos Armindo y la reina, ésta lo interroga sobre quién es su amada, él sigue siendo incapaz de confesar su amor, pero indirectamente se lo sugiere, es la propia Partenope la que tiene que deducir que es ella la persona por la que Armindo pierde los vientos. Eurimene (Rosmira), ya en libertad, soliicita a Armindo una entrevista con la reina para revelarle un secreto, mientras que Arsace parece que va teniendo claro que su verdadero amor es Rosmira (Eurimene). Fin del segundo acto.
Esta vez no escucharemos un aria por personaje sino una selección de arias variadas:
- EMILIO: “Barbaro fato si” . El rol de Emilio fue interpretado en el estreno por Annibale Pio Fabri (1697-1760), quien era conocido como “Balino”. Lo había contratado Haendel durante su viaje a Italia en 1729, era uno de los grandes tenores de la época, había cantado en óperas de compositores como Vivaldi, Vinci y Scarlatti. Y sorprendió que obtuviera éxito entre un público tan poco propicio a los tenores como el londinense, Mrs. Pendarves sólo pudo sacarle un defecto: le parecía que no era una voz muy potente para la escena, por lo demás lo describió como una voz de tenor “dulce, clara y firme”. En “Barbaro fato si”, situada tras la contienda entre las tropas de las ciudades de Nápoles y de Cumas, desesperado, se lamenta de su doble mala suerte, el destino ha sido cruel tanto en el amor como en la batalla. A juzgar por las características del aria era una voz muy flexible, con facilidad para la coloratura y con un fiato sobrado.
Escuchamos a Martyn Hill como Emilio con La Petite Bande y Sigiswald Kuijken en la dirección, en la que es primera grabación integral de la ópera, fue publicada en 1979:
Barbaro fato sì,
La speme mi tradì.
Povero Amore!
Non veggo nelle stelle
Al foco mio rubelle
Che rabbia, crudeltà, sdegno e furore.
PARTENOPE
- “Voglio amare”. Es este aria vuelve a salir a relucir la nobleza de la protagonista, el contraste con lo ridículos que llegan a parecer los personajes masculinos ha hecho que alguno haya llegado a hablar de Partenope como una ópera feminista. No es un aria que deslumbre a la primera escucha pero si es analizada con detalle se puede comprobar que es una de las obras maestras de la ópera. La escucharemos con La Petite Bande y Krisztina Laki bajo la dirección de S. Kuijken:
Voglio Amare infin ch’io moro
L’idol mio per mio ristoro
E perché so che ti spiace.
(A Rosmira)
Stringer poi lo voglio al petto
Per vendetta e per dispetto
Del tuo core, e per mia pace.
- “Qual farfalleta”. Este aria está inspirada en la primera aria de la Cantata “Tra le fiamme” (HWV 170). Cuando Partenope canta el aria acaba de conocer la noticia de que Armindo está enamorado de ella; sin embargo, la reina se ratifica en su amor por Arsace comparándose con una mariposa revoloteando sobre una luz, no cambiará, ella es constante. La escuchamos cantada por Rosemary Joshua con la Early Opera Company y la dirección de Christian Curnyn en grabación en estudio de 2004:
Qual farfalletta
Giro a quel lume
E ‘l mio Cupido
Le belle piume
Ardendo va.
Quel brio m’alletta
Perché m’è fido
La mia costanza
Ogn’altra avanza
Cangiar non sa.
ARMINDO. - “Non chiedo, o luci vaghe” se sitúa justo antes del aria anterior, Partenope por fin ha descubierto que Armindo la ama. Y él no quiere dejar de hacerlo. Canta Stephen Wallace con la dirección de Curnyn:
Non chiedo o luci vaghe
Se il cor voi mi feriste
Che mi saniate il cor.
Bramo serbar le piaghe
E vuo’ pupille belle,
Piaghe novelle ancor.
Esta vez no escucharemos un aria por personaje sino una selección de arias variadas:
- EMILIO: “Barbaro fato si” . El rol de Emilio fue interpretado en el estreno por Annibale Pio Fabri (1697-1760), quien era conocido como “Balino”. Lo había contratado Haendel durante su viaje a Italia en 1729, era uno de los grandes tenores de la época, había cantado en óperas de compositores como Vivaldi, Vinci y Scarlatti. Y sorprendió que obtuviera éxito entre un público tan poco propicio a los tenores como el londinense, Mrs. Pendarves sólo pudo sacarle un defecto: le parecía que no era una voz muy potente para la escena, por lo demás lo describió como una voz de tenor “dulce, clara y firme”. En “Barbaro fato si”, situada tras la contienda entre las tropas de las ciudades de Nápoles y de Cumas, desesperado, se lamenta de su doble mala suerte, el destino ha sido cruel tanto en el amor como en la batalla. A juzgar por las características del aria era una voz muy flexible, con facilidad para la coloratura y con un fiato sobrado.
Escuchamos a Martyn Hill como Emilio con La Petite Bande y Sigiswald Kuijken en la dirección, en la que es primera grabación integral de la ópera, fue publicada en 1979:
Barbaro fato sì,
La speme mi tradì.
Povero Amore!
Non veggo nelle stelle
Al foco mio rubelle
Che rabbia, crudeltà, sdegno e furore.
PARTENOPE
- “Voglio amare”. Es este aria vuelve a salir a relucir la nobleza de la protagonista, el contraste con lo ridículos que llegan a parecer los personajes masculinos ha hecho que alguno haya llegado a hablar de Partenope como una ópera feminista. No es un aria que deslumbre a la primera escucha pero si es analizada con detalle se puede comprobar que es una de las obras maestras de la ópera. La escucharemos con La Petite Bande y Krisztina Laki bajo la dirección de S. Kuijken:
Voglio Amare infin ch’io moro
L’idol mio per mio ristoro
E perché so che ti spiace.
(A Rosmira)
Stringer poi lo voglio al petto
Per vendetta e per dispetto
Del tuo core, e per mia pace.
- “Qual farfalleta”. Este aria está inspirada en la primera aria de la Cantata “Tra le fiamme” (HWV 170). Cuando Partenope canta el aria acaba de conocer la noticia de que Armindo está enamorado de ella; sin embargo, la reina se ratifica en su amor por Arsace comparándose con una mariposa revoloteando sobre una luz, no cambiará, ella es constante. La escuchamos cantada por Rosemary Joshua con la Early Opera Company y la dirección de Christian Curnyn en grabación en estudio de 2004:
Qual farfalletta
Giro a quel lume
E ‘l mio Cupido
Le belle piume
Ardendo va.
Quel brio m’alletta
Perché m’è fido
La mia costanza
Ogn’altra avanza
Cangiar non sa.
ARMINDO. - “Non chiedo, o luci vaghe” se sitúa justo antes del aria anterior, Partenope por fin ha descubierto que Armindo la ama. Y él no quiere dejar de hacerlo. Canta Stephen Wallace con la dirección de Curnyn:
Non chiedo o luci vaghe
Se il cor voi mi feriste
Che mi saniate il cor.
Bramo serbar le piaghe
E vuo’ pupille belle,
Piaghe novelle ancor.
Otras cuatro joyas, ahora me quedo con la zona central :-) La segunda, que no sé si deslumbrará pero te deja cara de bobo y es de las grandes, y la tercera, marca de la casa, porque no se me ocurre nada mejor que decir de ella, con ese maravilloso juego entre la voz y la orquesta y esa reiteración que la podría hacer eterna. Y muy bien cantadas. Mil gracias, cuando acabes este "pequeño" repaso, voy a tener que escucharme entera esta ópera. Y ya sabes que, por mi, como si cambias el nombre al blog y le llamas "No solo de Handel vive el hombre"
ResponderEliminarAhora sí coincido totalmente, lo mejor está en la zona central. De cambiarlo em estos momentos sería algo así como "Ponga un Haendel en su vida".
ResponderEliminar